El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, se reunirá mañana martes en Bruselas con el comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, para hablar del curso de las negociaciones para la reforma de la Política Agraria Común (PAC) y pedir que el acuerdo tenga en cuenta la diversidad del campo español.
BRUSELAS, 28 (EUROPA PRESS)
El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, se reunirá mañana martes en Bruselas con el comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, para hablar del curso de las negociaciones para la reforma de la Política Agraria Común (PAC) y pedir que el acuerdo tenga en cuenta la diversidad del campo español.
"Mañana me reuniré con el comisario Ciolos para abordar aquellos temas específicamente españoles, con los que no tienen la misma sensibilidad el Parlamento Europeo o el Consejo", ha anunciado a la prensa en Bruselas el ministro español.
Arias Cañete participa este lunes en el Consejo de ministros de Pesca y Agricultura de la UE que se celebra en la capital europea y alargará su estancia hasta el martes para poder tener un encuentro bilateral con el comisario.
También tiene previsto en su agenda un encuentro con la presidencia de turno de la UE, que este semestre ocupa Irlanda, como parte de los trabajos para "convencer" a sus colegas europeos de la incorporación de las demandas españolas.
En su encuentro con Ciolos, Arias Cañete pedirá que la reforma de la PAC "sea adecuada a la riqueza agronómica y a la diversidad que tiene la agricultura española", según ha explicado Arias Cañete, porque es "muy distinta" a la de otros países europeos, incluidos los del Mediterráneo.
El ministro española defiende que España cuenta con "todo tipo de cultivos" y con un territorio "muy extenso" con muchas hectáreas susceptibles de ser elegibles, lo que podría "complicar mucho" la adjudicación de ayudas en el futuro con un proceso de convergencia interna. Por ello, Arias Cañete pide que ese equilibrio de los subsidios entre regiones sea "muy modulado" para "evitar distorsiones" que afecten a la competitividad y a la productividad de los agricultores españoles.
