Hoy en día, se escucha hablar bastante de modalidades de financiación de maquinaria, vehículos y otros tipos de activo, como el renting y el leasing. Estos tipos de arrendamiento han conseguido agradar a los consumidores porque ofrecen la posibilidad de utilizar un determinado bien sin tener que comprarlo.
Se puede solicitar la financiación de todo tipo de vehículos y maquinaria (agrícola, industrial, eléctrica y de construcción entre otras opciones). En este artículo, abordaremos cómo el renting y leasing de vehículos industriales puede ser beneficioso para empresas e industrias que requieren el uso de maquinaria especializada.
Los vehículos industriales son esenciales para el buen funcionamiento de grandes industrias. Se trata de camiones, remolques, grúas, carretillas y todo tipo de vehículo utilizado para fines industriales.
Sin embargo, el precio de estos vehículos es elevado y empiezan a devaluarse desde el momento en el que salen del concesionario. Por eso, muchas empresas optan por modalidades de financiación como el renting. A continuación, te destacamos algunas de sus ventajas.
Ventajas del renting de transporte
Como ya hemos visto, el principal problema es el precio elevado de los vehículos industriales. No todos los empresarios están preparados o tienen suficiente capital como para hacer frente a un gasto tan elevado. Tampoco todos los dueños de empresas son aptos para solicitar financiación a través de entidades bancarias.
Este hecho hace que el renting sea la solución ideal. El usuario no tendrá que hacer frente a un pago inicial ni desembolsar grandes cantidades de dinero para poder utilizar los vehículos. Tampoco tendrá que solicitar la financiación por el banco.
Otro inconveniente que genera la compra de vehículos industriales es la obsolescencia. Este es un asunto que guarda una estrecha relación con el precio. Al tratarse de activos con precios muy elevados, los empresarios no pueden permitirse renovarlos con frecuencia. Esto les obliga a trabajar durante mucho tiempo con vehículos que ya están obsoletos.
El renting ofrece la posibilidad de actualizar la flota de vehículos industriales con más frecuencia. Al acabar el contrato, el usuario puede solicitar un nuevo arrendamiento y elegir una opción más moderna.
El último motivo que hace que los empresarios prefieran el renting es la ausencia de gastos adicionales en esta modalidad. Los vehículos industriales necesitan someterse a un mantenimiento con cierta frecuencia. Además, es necesario hacer un seguro y estar preparados por si surgen posibles averías. Todo esto hace que el precio final del vehículo aumente.
En el renting, esos gastos son responsabilidad de la empresa que concede la financiación de los vehículos. De esa forma, el usuario no tiene que preocuparse por un gasto inesperado. Su única preocupación será abonar la cuota mensual.
Por último, existe una gran variedad de vehículos y maquinarias industriales que se pueden arrendar a través del renting. De esta forma, es muy fácil que encuentres el vehículo ideal para satisfacer las necesidades de tu negocio.
Algunas opciones son furgonetas, camiones, cabezas tractoras, semirremolques, carretillas elevadoras camiones grúa y camiones frigoríficos, una gran variedad de vehículos industriales que te permite elegir aquél que mejor se adapte a tu empresa.