Muchos empresarios todavía siguen teniendo una mentalidad antigua y piensan que el dinero es lo más importante en el ámbito laboral, y lo mismo ocurre con algunos empleados. Sin embargo, la tendencia está cambiando en los últimos años, y la prueba de ello la tenemos en el salario emocional.
Ahora bien, el salario sigue siendo muy importante y es crucial que sea justo en base a lo que cada puesto se merece. Pero conviene recordar que hay otras tantas cosas que las empresas pueden ofrecer a sus trabajadores que va mucho más allá de una remuneración económica.
¿A qué llamamos salario emocional?
Lo podemos definir como una herramienta que utiliza la empresa para conseguir que el empleado esté más motivado e implicado. Contribuye a que el trabajador se sienta una parte fundamental del equipo, que sea más leal (es decir, que no se vaya a otra empresa porque le ofrezcan un salario mayor), incluso hay estudios que determinan que el salario emocional podría reducir el absentismo laboral.
Podremos entender mejor qué es el salario emocional viendo algunos ejemplos:
1. Horarios versátiles
Es un buen ejemplo de salario emocional. No debería entrañar gastos adicionales para la empresa y contribuye a crear un clima de trabajo favorable.
Incrementa la productividad y hace que los empleados estén más cómodos con condiciones que se adaptan a los compromisos familiares, formativos y sociales que se pueda tener.
Por otra parte, no todos rendimos igual de bien a las mismas horas del día. Con una óptima flexibilidad horaria, también se incrementará el nivel de eficacia.
Eso sí, cada empresa tendrá que estudiar si es posible.
2. Posibilidades de promoción
Muchos empleados se sienten atrapados en su puesto laboral porque no ven manera de evolucionar, de acceder a un ascenso o a un suelo mejor.
Un tipo de salario emocional es aquel que le ofrezca oportunidades de promoción en forma de promesas. Así podrá esforzarse día a día, a sabiendas de que su esfuerzo tendrá resultado.
Se sentirá mucho más realizado si sabe que podrá tener la oportunidad de adquirir nuevas responsabilidades de la posibilidad de promocionar dentro de la empresa.
3. Reconocimiento
Son muchos los empleados que, a pesar de haber ascendido de puesto y conseguir importantes mejoras económicas, se quejan de que no han obtenido un cierto reconocimiento por parte de sus jefes.
A todos nos agrada que nos digan que hemos hecho un buen trabajo. Y es que no hace falta más que un simple agradecimiento u palabras de elogio para que estemos motivados y listos para afrontar el próximo reto.
Conviene recordar que este tipo de salario emocional es completamente gratuito, tan solo se necesita a directivos atentos que sepan ver el esfuerzo y recompensarlo.
4. Teletrabajo
El teletrabajo es uno de los salarios emocionales que más valoran los trabajadores.
Muchos de los trabajos que se hacen ahora mismo de manera física se podrían estar llevando a cabo a través de nuestro hogar. Además de ser una buena forma de conciliar el empleo con nuestra vida laboral, también nos ayuda a reducir el estrés del día a día, además de eliminar el tiempo que perdemos en desplazamientos hacia el centro de trabajo.
Teniendo en cuenta los últimos sucesos, cada vez son más las empresas que están implantando el teletrabajo, aunque lo hacen por obligación, no como una forma de agradecimiento o de salario emocional.
5. Zona de relax
Siempre y cuando sea posible, un interesante salario emocional podría ser el de una zona en la que los trabajadores puedan descansar, hablar en un entorno distendido, incluso jugar al billar o a videoconsolas.
Estos lugares mejorarán el confort del empleado, además de elevar su productividad.
6. Toma de decisiones
Si se hace que el empleado sea partícipe de las decisiones que se toman en la entidad, incluso si puede participar en la “toma de decisiones”, este se sentirá más integrado en la empresa, mejorando su sentimiento de permanencia.
La toma de decisiones es clave para que los empleados se sientan que son escuchados y que sus opiniones no van a caer en saco roto, sino que se considerarán.
7. Otras prácticas
Ofrecer sesiones de yoga gratuitas, fisioterapia, o cualquier otra disciplina relacionada también podría entrar dentro del salario emocional.
¿Qué ventajas aporta el salario emocional a tus empleados?
- Mejora la sensación de bienestar: el trabajador empezará a concebir a su empresa como una entidad que verdaderamente se preocupa de satisfacer sus necesidades, y que va más allá de ser simplemente un negocio que cuenta billetes sin parar. Se sentirán mejor, se elevará el nivel motivación y se sentirán realizados al ver que su esfuerzo se reconoce. Todo esto también contribuye a que se reduzca el estrés, y a evitar el absentismo laboral.
- Conciliación con su vida laboral: la mayoría de los trabajadores tienen que hacer auténticos malabares para conciliar su vida laboral con su trabajo. Con un salario emocional que consista en flexibilizar los horarios, en implantar el teletrabajo, incluso en ofrecer servicios especiales para el cuidado de niños, reducirá este nivel de estés y permitirá mejorar la productividad.
- Mayores oportunidades de desarrollo: y si estamos hablando de salarios emocionales que consistan en formación para mejorar su posición en la empresa, para mejorar sus habilidades o desarrollar capacidades (cómo los programas de coaching), el empleado podrá evolucionar tanto cómo persona, cómo profesional.
Concluyendo, cuanto mayor sea el nivel de motivación de tus empleados, mejor será el índice de productividad y a la empresa le resultará mucho más fácil lograr los objetivos que se ha planteado. Pero es importante considerar que al empleado no solo le motiva un buen sueldo, sino que existe el salario emocional y que este estará compuesto por diferentes factores.
Es responsabilidad de la empresa crear un clima laboral adecuado para mejorar la productividad, la motivación y las ganas de trabajar. Así también retendrá el talento, evitando que los empleados se puedan ir a otra empresa porque le ofrece facilidades que no encuentra en la que estaba.