La Comisión Europea ha autorizado este miércoles sin condiciones la compra de la firma española de cable Ono por parte de la operadora británica Vodafone -operación valorada en 7.200 millones de euros- tras constatar que la operación no plantea problemas de competencia en el mercado comunitario.
BRUSELAS, 2 (EUROPA PRESS)
La investigación de Bruselas ha puesto de relieve que las actividades de las dos empresas son "en gran medida complementarias". Ono opera principalmente en el sector de las telecomunicaciones fijas, mientras que Vodafone lo hace sobre todo en el de las móviles. Ono también presta servicios de televisión de pago, pero Vodafone, no.
En cuanto a los solapamientos que existen entre las actividades de las dos empresas en los mercados de telecomunicaciones fijas y móviles, la Comisión considera que éstos son "limitados" y que la entidad resultante de la concentración tendrá que seguir enfrentándose a rivales importantes como Telefónica, Orange y Jazztel.
La operación da lugar también a algunas relaciones verticales y de conglomerado en los mercados de las telecomunicaciones fijas y móviles en España, en particular en relación con la prestación de servicios múltiples incorporados. Sin embargo, la investigación de la Comisión reveló que la entidad fusionada no estará en condiciones de excluir operadores fijos o móviles de los mercados de servicios múltiples, debido a la disponibilidad de operadores alternativos y a las obligaciones reglamentarias en relación con el acceso al por mayor a servicios móviles y fijo
Por consiguiente, la Comisión ha llegado a la conclusión de que la operación no obstaculizará de forma significativa la competencia efectiva en España. La adquisición se notificó a Bruselas el 23 mayo 2014.