La consejera de Agricultura y Ganadería de Castilla y León, Silvia Clemente, se ha comprometido a agilizar los trámites de creación del Consorcio de Exportación del Lácteo con el fin de impulsar la internacionalización del producto en distintos países de la Unión Europea y minimizar así los efectos del veto ruso imperante desde agosto.
VALLADOLID, 29 (EUROPA PRESS)
La constitución del referido Consorcio es uno de los instrumentos recogidos en la Estrategia de Internacionalización del departamento de Clemente–se contempla crear otros de forma sectorial–y podría incluso estar listo antes que el específico del sector quesero, el más avanzado tras la creación de la marca 'Queso Castellano', tal y como ha apuntado Clemente, en declaraciones recogidas por Europa Press, al término del Consejo Regional Agrario celebrado hoy y que, casi con carácter monográfico, ha analizado las repercusiones del veto ruso a la importanción de productos de la UE.
El objetivo, en palabras de la consejera, es "afianzar los principales destinos o mercados de Castilla y León para llevar allí las producciones que antes iban a Rusia", tras constatar que el sector lácteo es uno de los que se pueden ver afectados en un futuro por el cierre de fronteras rusas a las importaciones de productos agroganaderos de la UE.
AFIANZAR OTROS DESTINOS
"Se trata de que los productos lácteos de Castilla y León puedan salir a los mercados exteriores de forma ágil y con mayor potencia para ocupar un espacio en mercados en los que ya existe la compra de producciones de esta Comunidad", ha insistido Clemente, quien ha añadido que las principales acciones de internalización se centrarán en aquellos países que actualmente constituyen los principales destinos de nuestra producción, como, fundamentalmente, Portugal, donde las exportaciones cárnicas superan los 112 millones, Francia, Italia, Reino Unido y Alemania.
De hecho, la titular de Agricultura ha recordado que la internacionalización de la producción agroganadera castellanoleonesa ha sido una de las principales líneas de ataque contra la situación de crisis de los últimos años y ha puesto como ejemplo el hecho de que gracias a ello las exportaciones de Castilla y León se hayan visto incrementadas en un 35 por ciento en el periodo 2009-2012, política afianzada incluso desde 2013 tras la imposición por parte de Rusia de unas "duras condiciones sanitarias" a la importación de productos cárnicos, lo que Clemente ha denominado "veto no oficial", y que obligó a los productores europeos a buscar otros destinos, fundamentalmente el país germano.
En cualquiera de los casos, la consejera ha vuelto a minimizar la "incidencia directa" del veto ruso con respecto a la producción castellanoleonesa, ya que, tal y como ha advertido, la misma ha sido cifrada en unos 15 millones de euros, equivalente al 1,07 por ciento del total de las exportaciones agroalimentarias en 2013, cifradas en 1.500 millones de euros.