La cama hiberbárica es uno de esos lujos al alcance de muy pocos bolsillos que está disponible para los pacientes de Olympia en su área de Sport Center. Según expone la doctora Ane Escribano, especialista de esta unidad, su uso tiene múltiples beneficios y además puede curar muchas patologías.
Escribano explica que la cama hiperbárica es muy positiva para el bienestar y ofrece resultados extraordinarios para el rejuvenecimiento de la piel, la cicatrización de las heridas, el pie diabético, traumatismos en partes blandas o úlceras crónicas.
Desde estos argumentos, se entiende que muchos deportistas de élite usen este elemento de descanso para acortar los plazos de sus lesiones musculares, entre otras dolencias.
El oxigeno, la clave de la cama hiperbárica
El factor que diferencia a una de estas camas está en la oxigenación, pues tiene un rol importante en la fisiología del ejercicio físico. “Cuando todos los procesos metabólicos están ralentizados por la falta de oxígeno, el tenerlo disponible puede disminuir la sensación de agotamiento y aumentar el rendimiento deportivo”, indica la doctora.
Respecto a los traumatismos, el oxigeno que aporta la cama hiperbárica a los pacientes permite una aceleración en la curación de las fracturas. Esto es posible porque el oxígeno es necesario para la producción de colágeno, así que se estimula la angiogénesis y la osteosíntesis necesaria para la regeneración ósea. Por otro lado, el paciente consigue una mayor elasticidad en la piel, mejorando su textura.
Complemento a la radioterapia
La cama hiperbárica puede ser beneficiosa para pacientes con cáncer, en el sentido de que ayuda a recuperar la toxicidad que tienen tratamientos de radioterapia. Se puede prevenir este problema con oxigenoterapia hiperbárica, como comenta la especialista, “por ejemplo la cistitis rádica, la osteorradionecrosis (mandíbula, costillas), o la fibrosis, etc.”, subraya la doctora.
Lo cierto es que la cama hiperbárica está siendo objeto de estudio en muchas patologías sobre las que podría tener efectos muy positivos.
Hoy en día hay otras muchas patologías que se podrían beneficiar de la terapia hiperbárica pero que todavía están en investigación. “Entre otras, la sordera súbita, acúfenos, tratamiento previo a las sesiones de radioterapia para aumentar la radiosensibilidad de las células cancerosas, en implantes dentales…”, concluye la doctora Escribano.