Naturgy y el BEI (Banco Europeo de Inversiones), han dado un nuevo impulso decisivo para la transición energética en España. Ambas organizaciones acaban de firmar un acuerdo que comprende un paquete de financiación de un total de 1.000 millones de euros para ampliar la capacidad de generación de energía renovable en el territorio nacional. Fuentes oficiales van más allá y afirman que con esta colaboración se contribuirá a la cohesión territorial y a la creación de empleo en áreas rurales y menos favorecidas.
Primera fase: 400 millones
La primera fase de esta financiación, que asciende a 400 millones de euros, ya ha sido formalizada en Madrid por Francisco Reynés, presidente ejecutivo de Naturgy, y Jean-Christophe Laloux, director general del BEI. El objetivo principal de este acuerdo es la construcción de nuevas plantas solares fotovoltaicas y eólicas terrestres, así como la repotenciación e hibridación de instalaciones ya existentes.
Estas inversiones permitirán aumentar en 2,3 gigavatios (GW) la capacidad de generación de energía renovable en España, un paso crucial en el compromiso del país con los objetivos climáticos europeos y globales. Se prevé que esta nueva infraestructura genere suficiente energía verde para abastecer a más de 1.150.000 hogares al año, lo que supone una contribución significativa a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y a la lucha contra el cambio climático.
Además, el proyecto contempla inversiones en sistemas de almacenamiento mediante baterías, una tecnología clave para asegurar la estabilidad y eficiencia del sistema eléctrico en el contexto de una mayor penetración de energías renovables. Las baterías permitirán almacenar el excedente de energía producido en momentos de alta generación y liberarlo cuando la demanda sea mayor, mejorando así la gestión de la red y la seguridad energética.
Impacto económico y social del acuerdo Naturgy-BEI
Uno de los aspectos más destacados del proyecto es su impacto en la creación de empleo y el desarrollo regional. Según Reynés, estas inversiones promoverán la generación de 4.200 puestos de trabajo durante la fase de construcción, con un enfoque especial en la España vaciada, aquellas zonas rurales y despobladas que necesitan nuevas oportunidades para revitalizar sus economías locales. Este esfuerzo no solo contribuirá a la cohesión territorial, sino que también fomentará un modelo de desarrollo más equitativo y sostenible.
En este sentido, Laloux destacó que el acuerdo con la compañía española refleja el compromiso del BEI no solo con la transición energética, sino también con la cohesión económica, social y territorial. La mayor parte de las inversiones se realizarán en regiones de cohesión, es decir, aquellas cuya renta per cápita está por debajo de la media europea, ayudando a cerrar la brecha económica entre diferentes áreas del país.
El papel del BEI en la transición energética europea
Este acuerdo se enmarca en el plan REPowerEU, una iniciativa de la Unión Europea destinada a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y acelerar la transición hacia un sistema energético sostenible y autónomo. El BEI ha desempeñado un papel crucial en este esfuerzo, con una financiación de más de 21.000 millones de euros en 2023 destinados a proyectos de seguridad energética en Europa. En España, esta cifra ascendió a 4.513 millones de euros, apoyando proyectos de energía renovable, eficiencia energética, redes eléctricas y almacenamiento.
El plan REPowerEU, impulsado tras el conflicto en Ucrania y la consecuente crisis energética, tiene como objetivo aumentar la resiliencia del sistema energético europeo. En julio de 2023, el BEI decidió aumentar los fondos asignados a este plan hasta 45.000 millones de euros, con el objetivo de movilizar más de 150.000 millones de euros en inversiones. Estos fondos no solo se destinarán a proyectos de generación de energía renovable, sino también a la promoción de tecnologías de cero emisiones netas y la gestión sostenible de materias primas estratégicas, esenciales para la transición energética.
El contexto actual de España en la transición energética
España, por su geografía y clima, tiene un enorme potencial para convertirse en un líder europeo en energías renovables. La abundancia de sol y viento en diversas regiones del país proporciona una base sólida para el desarrollo de proyectos solares y eólicos a gran escala. Sin embargo, la transición energética también plantea desafíos significativos, como la necesidad de modernizar y expandir las redes eléctricas para integrar la nueva capacidad renovable y asegurar un suministro estable y fiable.
El acuerdo entre Naturgy y el BEI aborda algunos de estos desafíos, no solo mediante la construcción de nuevas plantas, sino también a través de la hibridación de instalaciones existentes. Este enfoque maximiza el uso de los recursos y mejora la eficiencia de las inversiones, permitiendo una integración más flexible y eficiente de las renovables en el sistema eléctrico.