La obsesión por perder peso siempre ha sido un tema recurrente en redes sociales. Instagram y TikTok se llenan de vídeos y contenido sobre las famosas dietas milagro para adelgazar que nutricionistas y especialistas sanitarios rechazan al ser potencialmente perjudiciales para la salud. Bien distinta es la popularidad que han alcanzado medicamentos como Ozempic que, con un buen seguimiento médico, han demostrado ser eficaces para la obesidad.
Pero volviendo a las tendencias virales, hay que destacar una que sí que es aplaudida por los sanitarios. Se trata del método 30-30-30 para perder peso, una fórmula que explica para Directivos y Empresas el doctor Borja Núñez de Aysa, especialista en Medicina Deportiva y Rehabilitación de Olympia Quirónsalud.
Método 30-30-30 para perder peso: un enfoque natural y con mucho sentido común
El método 30-30-30 para perder peso tiene una gran acogida por los expertos porque mejora la composición corporal y potencia la salud metabólica. Estas palabras ya suenen muy bien para los especialistas
¿En qué consiste? En ingerir 30 gramos de proteínas en los primeros 30 minutos del día y realizar 30 minutos de ejercicio aeróbico de baja o moderada intensidad.
«No solo es una forma eficiente de perder peso, sino también de mejorar el metabolismo y la salud cardiovascular», señala el Dr. Núñez de Aysa.
La mañana, una de las claves del método
En esta combinación de números, una de las claves pasa por el momento de la ingesta. Según el experto de Olympia, el organismo tiene una mayor capacidad para quemar calorías en las primeras horas del día. Mientras dormimos, el metabolismo entra en un estado de descanso y, al despertar, se encuentra en su punto más receptivo para aprovechar la energía de los alimentos y convertirla en gasto calórico.
«Las proteínas matutinas aportan saciedad, aceleran el metabolismo y favorecen la quema de grasa desde el comienzo del día», explica el especialista. Además, este macronutriente desempeña un papel clave en la preservación de la masa muscular, un aspecto fundamental para quienes buscan perder peso sin comprometer su estructura corporal.
El ejercicio, la otra clave para perder peso
El otro pilar del método 30-30-30 para perder es el ejercicio cardiovascular. Pero lejos de exigir entrenamientos de alta intensidad, la clave está en realizar actividad aeróbica moderada: caminar a paso ligero, trotar suavemente o incluso andar en bicicleta.
«Lo idóneo es moverse lo suficiente como para sudar levemente», indica Núñez de Aysa. Además, con esta práctica se cumplen las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que aconseja un mínimo de 150 minutos de actividad aeróbica moderada o 75 minutos de ejercicio intenso a la semana.
Además de contribuir a una reducción progresiva del peso, el método 30-30-30 favorece una serie de beneficios para la salud:
- Regulación del reloj biológico: Exponerse a la luz natural en la mañana ayuda a sincronizar los ritmos circadianos, mejorando la calidad del sueño y la energía diurna.
- Prevención del sobrepeso y la diabetes tipo 2: Mantener hábitos saludables desde el inicio del día reduce el riesgo de desarrollar estas enfermedades metabólicas, consideradas epidemias del siglo XXI.
- Aumento del bienestar emocional: La actividad física matutina estimula la producción de endorfinas y serotonina, hormonas asociadas con el estado de ánimo positivo y la reducción del estrés.
- Un hábito sostenible: A diferencia de dietas extremas o entrenamientos agotadores, esta rutina es fácil de incorporar al día a día sin generar frustración o sensación de sacrificio.
Con todo, frente a la rapidez y las exigencias de la vida moderna, el método 30-30-30 para perder peso que se está popularizando en las redes recuerda que la clave para el bienestar no siempre está en las soluciones más complicadas, sino en volver a lo esencial, a lo de siempre y al sentido común.
