El presidente y consejero delegado de JP Morgan, James Dimon, ha asegurado que lo fácil para una entidad financiera sería no asumir riesgos, pero que, en cambio, el banco estadounidense ha invertido en España e Italia, demostrando que también está presente en los malos momentos.
DAVOS-KLOSTERS (SUIZA), 23 (EUROPA PRESS)
El presidente y consejero delegado de JP Morgan, James Dimon, ha asegurado que lo fácil para una entidad financiera sería no asumir riesgos, pero que, en cambio, el banco estadounidense ha invertido en España e Italia, demostrando que también está presente en los malos momentos.
Durante su intervención en una de las sesiones de la reunión anual del Foro Económico Mundial que se celebra en la localidad suiza de Davos, Dimon recalcó que JP Morgan no es un «amigo sólo para lo bueno», sino que ha estado ahí tanto en los buenos como en los malos tiempos, prestando 15.000 millones de dólares (11.271 millones de euros) a España e Italia, descontados derivados y colaterales.
«Es muy fácil decir 'no asumimos riesgos'. Tenemos que gestionar el riesgo, algo podría ir mal», aseguró Dimon durante su intervención, según recoge la organización en una nota de prensa.
Los líderes de algunas de las mayores entidades financieras del mundo participaron este miércoles en el foro y todos los asistentes se mostraron de acuerdo en que el sector es demasiado complejo y opaco, con la excepción de Dimon.
El subdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Min Zhu, aseguró que la gran crisis financiera de los últimos años se debe a que el sector financiero era «demasiado grande». «Los bancos pasaron a actividades basadas en el mercado, donde es más opaco y hay menos regulación. Los productos son demasiados complicados. Tenemos un largo camino por recorrer», señaló.
Por su parte, el consejero delegado de JP Morgan respondió que los bancos no son opacos, pero sí complejos. «Los negocios pueden ser opacos. Son complejos. Tampoco sabes como funcionan los motores de un avión», argumentó Dimon, quien defendió que algunos bancos son «puertos en la tormenta porque eran fuertes y diversificados y ayudaron a los países a sobrevivir».
Los participantes también coincidieron en que era necesario avanzar en la regulación del sector, aunque no compartieron la mismo opinión sobre hasta donde debe llegar y sobre si una regulación a nivel global es posible en el actual entorno «multipolar y de rápido cambio».