El presidente de IMF Business School, Carlos Martínez, habla de las necesidades formativas de una sociedad que ha cambiado y con unos alumnos que demandan mucho flexibilidad y personalización.
Empecemos por uno de los últimos informes relacionados con el empleo y digitalización salidos de IMF. ¿Cuáles son las profesiones que necesitan urgentemente un reciclaje?
Todas las profesiones lo necesitan, aunque en aquellas relacionadas con la digitalización y la tecnología se necesita una actualización constante. Para ese tipo de perfiles es imprescindible.
¿La legislación también necesita de un cierto reciclaje, es decir, tiene que adaptarse a los nuevos modelos de negocio?
Estamos ante el eterno déficit del Derecho, que suele ir siempre detrás de la sociedad y muchas veces llega tarde. Hoy, por ejemplo, hay disputas continuas en lo que se refiere a los nuevos modelos de empleo surgidos de las plataformas digitales tipo Uber, Cabify…
Se va creando jurisprudencia, pero queda mucho por hacer. No nos podemos permitir tener a trabajadores en una especie de limbo.
¿Diría que el cambio en el liderazgo ha llegado ya o se necesita entender aun que las estructuras verticales no tienen agilidad hoy en día?
El modelo de liderazgo ha cambiado. De coercitivo, de vara y palo, a un liderazgo mucho más moral, en el que prima la humanidad, la confianza. También es resultado de tener a empleados con una cualificación mucho más alta, que valoran un salario emocional.
Es de suponer que las escuelas de negocio tratan de ir por delante de estos cambios. ¿La docencia y los profesiones de su entorno son hoy muchos más analíticos que antaño?
Lo son, y se tienen en cuenta otros conceptos. En IMF Business School trabajamos en el concepto persona y en el concepto digitalización, tenemos que combinar las soft y hard skills, imprescindibles para el mercado laboral en el que nos movemos.
¿Son más efectivas las microenseñanzas o tutoriales en el alumnado de hoy? ¿Cuál es la metodología más influyente en su entorno formativo?
El alumno cada vez demanda más personalización y quiere diseñar su propio programa educativo. Tenemos la obligación de adaptarnos.
El MBA, la estrella de IMF Business School
Desde la amplia oferta que disponen en IMF Business Shool, ¿cuáles son los másteres más demandados y los canales preferidos por los alumnos?
El MBA sigue siendo el programa estrella. A continuación, todos los que tienen que ver con contenidos digitales y tecnológicos: Big data, Blockchain, Ciberseguridad, Marketing Digital…
Como experto en Recursos Humanos, ¿usted es de los que piensan que estamos en medio de una guerra mundial por el talento?
Sin duda. Nos movemos en un mercado muy polarizado, con muchas personas que no se han formado más allá del bachillerato (y que suponen el 50% de los desempleados) y otro tanto por ciento de gente hipercualificada. Y mientras que para los primeros su sueldo ha bajado un 10%, para estos últimos crece un 15%.
¿Medir el rendimiento de un trabajador con las tecnologías actuales podría tener malas consecuencias para su productividad?
El responsable es quien hace uso de la tecnología, pero tenemos que tener en cuenta que hoy el trabajador vende cada vez más su trabajo en vez de su tiempo. Trabaja por proyectos, que es una modalidad que va en aumento y que también está pendiente de legislación, para evitar la figura del falso autónomo.
Un indicador empieza a relvarse como clave en las empresas con la llegada de los millennials: la felicidad. ¿Se trabaja esta faceta en las compañías españolas?
En un país formado en una abrumadora mayoría por micropymes, veo complicado cómo encajarlo. En las grandes compañías es otra cosa, aunque no tengo muy claro si es posible ese modelo.
En un entorno más a favor de colaboración entre organizaciones. ¿Nota más interés por parte de las empresas en el mundo de la formación?
No. Las empresas y los trabajadores son reacios a formarse, la verdad. A veces hacemos cursos abiertos, con contenidos interesantes y útiles para cualquier empleado, y acaban desiertos.
¿Las escuelas de negocio siguen teniendo la misma influencia que antaño en la clase políticas y las estrategias económicas de un país como España?
Además de formar, las escuelas de negocio son espacios de networking, siguen siendo foco de interés, claro que influyen.
¿Cómo espera este 2019 en términos de empleo para nuestro país? ¿Seguirá la tendencia del año anterior?
Creo que estamos en un momento de tormenta perfecta: crisis política en España, un contexto internacional complicado… se han tomado decisiones con un impacto directo, como la subida del SMI, de las cotizaciones sociales.
Creo que los primeros meses se va a maquillar, pero a partir del mes de mayo entraremos en barrena, con las incertidumbres provocadas por el Brexit. Hay demasiadas incógnitas.
