Mario Armero, Vicepresidente de la Asociación de Fabricantes de Vehículos, sostiene que la verdadera recuperación del sector del automóvil tiene que sostenerse en medidas estructurales a medio y largo plazo, si bien aplaude el Plan PIVE y su prorrogación porque supone “una bocanada de aire fresco”. Asimismo, pone de manifiesto el importante esfuerzo comercial que en general están haciendo todas las marcas.
– Señor Armero, ¿se puede decir que el gobierno ha hecho una buena apuesta por el sector del automóvil con las medidas implantadas últimamente?
El Gobierno es conocedor de los beneficios que ha supuesto el Plan PIVE tanto para la economía española como para la sociedad. La industria del automóvil es uno los sectores que más puede aportar para el crecimiento económico en España. El sector ha anunciado ya inversiones por encima de los 2.000 millones de euros. Son buenas noticias en un entorno económico complicado.
– ¿Es imposible que prospere el sector sin las prórrogas de las ayudas? ¿Qué otras ayudas ha planteado usted para la supervivencia de este ramo de la economía?
En el contexto económico en el que nos encontramos el Plan PIVE ha supuesto un salvavidas para las matriculaciones de turismos en el año 2012. Gracias el Plan PIVE se hubiera acabado el año con volúmenes aún más bajos.
La propuesta del Gobierno con la prorrogar el Plan PIVE ha supuesto una bocanada de aire fresco para el mercado de turismos. ANFAC está en constante contacto con la Administración. La noticia de la continuidad del Plan PIVE y el Nuevo Plan PIMA Aire para la renovación de furgonetas, ha sido acogida por el sector del automóvil con alegría.
Estamos satisfechos y agradecidos con los pasos que ha dado el Gobierno y ahora los usuarios tienen que aprovechar las condiciones tan favorables que tienen para poder sustituir su vehículo antiguo por uno más eficiente y seguro.
Siempre hemos pensado que este tipo de planes suponen apoyos puntuales con un efecto inmediato en el corto plazo. Pero también creemos que la verdadera recuperación del mercado tiene que sostenerse sobre medidas estructurales a medio y largo plazo. El mercado potencial de España está entre 1’2 y 1’3 millones de unidades. Para alcanzar esa cifra en los próximos años se necesitará una reorientación de la fiscalidad, de manera que bajo un prisma de rentabilidad fiscal, se tribute más por la tenencia a uso que por la compra.
– Las financieras de las marcas han ganado terreno frente a la banca tradicional en estos años. ¿Qué valoración hace de estos cambios?
El entorno de los bancos y cajas se encuentran en un momento de severa restricción crediticia. Los fabricantes han financiado sus propias ventas aprobando el 85% de las operaciones solicitadas lo que le ha dado luz verde al desarrollo del Plan PIVE.
– ¿Cree que con el tiempo las financieras de las firmas serán una parte importante del negocio de las mismas, dada la baja morosidad en este ámbito?
Sin duda las financieras han sido un punto muy importante para el funcionamiento del Plan PIVE. Las propias financieras de marca han favorecido aún más al consumidor ofreciendo rebajas adicionales. Los créditos para adquirir vehículos presentan una morosidad mucho más baja que la tasa total que afrontan cajas y bancos, incluido el préstamo hipotecario, que está en torno al 10%.
– Da la sensación de que, al contrario que los pisos, los coches no pueden bajar mucho más sus precios. ¿Se ha llegado a un tope en este sentido?
Mientras que los precios en general suben, los precios de los vehículos bajan, con una media de 4,6% con respecto al 2011. Las marcas han realizado un esfuerzo comercial realmente espectacular haciendo un descuento medio de 3.800€. Este esfuerzo promocional les ha supuesto a las marcas 173 millones de €.
– No obstante, ¿cree que se van a poder llegar a las cifras de ventas de años buenos como el 2005 o el sector lo ve ya inalcanzable?
Desde ANFAC se está trabajando para poder recuperar el mercado. El escenario económico por el que está pasando España, no es el más favorable. El Plan PIVE y el Plan PIMA Aire son fundamentales para mejorar o por lo menos mantener los volúmenes de matriculaciones de vehículos a corto plazo. A medio y largo plazo creemos que España tiene potencial para recuperar mercado.
*Más información en el próximo número de la revista Directivos y Empresas