El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Ángel Gurría, ha instado a países como España a centrarse en la productividad para poder incrementar salarios en el futuro tras el trabajo «muy duro» realizado en España para llevar a cabo el necesario ajuste salarial.
PARÍS, 15 (EUROPA PRESS)
En la presentación de la actualización de septiembre de su informe de evaluación de la economía global, Gurría destacó que España ha registrado un ajuste «muy importante» de lo salarios reales, que en el caso de algunos sectores se ha traducido también en ajuste de los salarios en términos nominales.
En este sentido, el secretario general de la OCDE, que recordó que estuvo la semana pasada en Madrid presentando el informe de la organización sobre la economía española, recalcó que la organización tiene una posición muy clara sobre este asunto.
Así, resaltó durante quince años en muchos países los salarios crecieron mucho más que la productividad, lo que ha creado una brecha en la competitividad entre economías de la eurozona.
En concreto, apuntó que en países como España, Irlanda, Portugal, Italia, Grecia y Francia los salarios han crecido de forma sistemática más que la productividad, al contrario de los que ha ocurrido en otras economías como la alemana, generando una brecha entre países de hasta el 30%.
En este sentido, destacó que la brecha no se ha cerrado aún, pero se está produciendo «cierta convergencia», ya que Alemania está ayudando a que esto ocurra con la subida del salario mínimo o de los salarios nominales, que complementa el «muy duro trabajo» realizado en España para reducir los salarios nominales.
Gurría recalca que algunos pases deben continuar con los ajustes salariales, y algunos incluso empezarlos, pero que en aquellos en los que ya se ha registrado un «gran ajuste» es hora quizás de centrarse más en la productividad.
«La única manera en la que podremos ver un aumento de los salarios en el futuro es si van de la mano con la productividad», ya que de otra manera volvería a repetirse la historia de años anteriores, añadió el secretario general de la OCDE.