Cada ciclo económico representa una etapa de cambio y transformación para las empresas. La diferencia entre periodos es básicamente la velocidad y el ritmo de la transformación. No obstante en todas ellas se han dado una serie de líderes que realizan una gestión del cambio distinta.
La aparición de internet generó en su momento una nueva manera de liderar en las organizaciones, empezando a desaparecer la vieja Mentalidad de Estabilidad. Esta consistía en que los decidían todas las fases de la gestión del cambio para evitar riesgos. Era un liderazgo caracterizado por la firmeza y la calma de los jefes.
Para el vicepresidente de BTS, André Ribeiro, “estos líderes procuran tener esta mentalidad con el fin de crear seguridad en sus equipos de trabajo”. Sin embargo, la época actual es distinta a los demás ciclos y por ello Ribeiro asegura que este liderazgo y esta mentalidad de estabilidad no son adecuadas para el momento en que nos encontramos.
La mentalidad de oportunidad y los cuatros líderes para la gestión del cambio actual
Así que lo primero que debe plantear desde las altas esferas directivas es un cambio de mentalidad para ponerse en modo oportunidad. Esta nueva forma de pensar no concibe el riesgo, sino la confianza en lugar de la duda. En base a ello, en este momento se puede encontrar cuatro tipos de líderes para gestionar el cambio:
Jefes presionados
Este tipo de personas no tienen el control de la situación cuando se sienten presionados. En la gestión del cambio, suelen esperar a ver qué decisiones toman los demás. Analiza todo y, de hecho acepta indicaciones, pero es reacio a pensar que los cambios vayan a funcionar en su empresa.
Los que se afanan por mantener el poder
El siguiente perfil es el líder que busca mantener el poder y su autoridad. SE hacen fuertes ante el cambio y son de los que piensan que todo lo que ha funcionado hasta el momento no se debería cambiar. A estos jefes se les detecta por sus pocas decisiones de futuro, las críticas sobre las novedades sin ofrecer alternativas, su aversión al futuro, la poca comunicación o su querencia para controlar todo lo que esté en sus manos.
Los que quieren controla la gestión del cambio
Este otro tipo de jefes se diferencian del resto por querer controlar las crisis y el efecto que causan alrededor. Se trata de dirigentes que actúan y toman decisiones de manera independiente, dan al resto de personas instrucciones sobre lo que deben hacer, se interesa por cuestiones menores y buscan a toda costa mantener su plan original.
Líderes preparados para el cambio
Los líderes que ven el cambio como algo normal, son líderes fuertes que analizan el entorno, se anticipan y perciben los objetivos, a diferencia de los demás que observan desafíos. Muchos de ellos elaboran un plan B y C, porque saben de las posibilidades de fallo del A. Disponen a sus equipos en la dirección y el propósito perseguido en lugar de decirles lo que hacer, creando un entorno de aprendizaje para que las personas se adapten y cambien juntas.
Estos jefes son los que tienen la llamada mentalidad de oportunidad y permiten que las personas encuentren su propia razón para llevar a cabo el cambio y desarrollar la comprensión, fundamental para crear la confianza. Son personas abiertas, que escuchan y que no les importan cambiar de opinión si hay alteraciones positivas en la hoja de ruta inicial.
“Para estar preparados para el cambio, los líderes deben entender tanto el cómo, como el cuándo, así lo afrontarán de forma eficaz dentro del contexto de su empresa. Además, esto funciona mejor si se reconocen las capacidades y los comportamientos que diferencian a un buen líder, debido a que identificarlos es la mejor herramienta para la gestión del cambio»
André Ribeiro, vicepresidente de BTS