Ni Europa, ni España están cerca de alcanzar la paridad directiva. En el caso nacional, el 63% de los negocios no cuentan con mujeres en sus comités de dirección.
Son los datos que arroja el informe Mujer y Liderazgo, dirigido por la profesora de Iniciativa Emprendedora de OBS Business School, Marta Grañó. La experta habla de la necesidad de derribar estereotipos y acelerar el impulso de medidas para frenar la desigualdad de género.
Con motivo del 8-M, las informaciones del mes de marzo suelen dedicar una parte muy importante a aspectos relacionados con la brecha de género y las cuotas de liderazgo de las mujeres.
En el ámbito empresarial, hay que seguir resaltando que la paridad queda aún lejos en los puestos directivos y no es solo una cuestión española, sino que tiene un alcance mucho mayor. De hecho, en Europa, ningún país tiene en estos momentos un 50% de mujeres en los consejos de administración.
A pesar de una mayor presencia de mujeres en las universidades y de los avances que se han dado en derechos sociales para ellas, la docente sostiene que es una falacia hablar de igualdad de género en temas de liderazgo.
Empezando por los altos niveles públicos, de los 195 jefes de estado que hay en el mundo, 28 son mujeres, según datos de la ONU a septiembre de 2022.
Ya en empresas, es evidente que no se ha alcanzado la paridad viendo los datos que se dan en la eurozona. De entre todos los países de la UE, Francia destaca por encima del resto al tener el 45% de mujeres sentadas en los consejos de administración.
En el lado opuesto, Hungría solo cuenta con un 9%. A nivel global, los datos de la lista Fortune 500, es decir, las empresas con mayores ingresos en el mundo, solo existen 24 mujeres CEO, es decir, una tasa del 4,8% de cuota de liderazgo femenino.
La desigualdad en los organigramas también se traduce posteriormente en las retribuciones. En Europa, la media de los sueldos de ellas es un 13% inferior al de ellos.
Liderazgo femenino en España
En el caso de España, la presencia de la mujer en los consejos es del 33%, teniendo en cuenta las empresas del Ibex o estatales, que son aquellas que tratan de reducir la brecha con más recursos e iniciativas.
Fuera del selectivo, la desigualdad es muy palpable, teniendo en cuenta que el 63% de los negocios españoles no tienen a ninguna mujer en los comités de dirección.
Es imperativo derribar estereotipos que todavía persisten en torno a la persona líder y que están impidiendo a muchas mujeres alcanzar los puestos que se merecen”
Según el tamaño de las compañías, el 65% de las que cuentan con menos de 50 empleados no tiene mujeres en posiciones directivas; de entre 50 y 100 empleados, el portaje baja hasta el 48,2%; y las que tienen más de 100 profesionales en plantilla, un 43,7%.
En resumen, hoy en día existen muchas empresas en las que la mujer no está accediendo a cargos de alta responsabilidad. En otras palabras, la mitad de la población sigue lejos de la visibilidad, el poder y las oportunidades que sí gozan la otra mitad.
Habilidades y estereotipos
Detrás de estas cifras, no hay un problema de habilidades y sí de mentalidad. 12 de las 16 competencias señaladas por Zenger y Folkman para impulsar organizaciones productivas, rentables y con una plantilla comprometida son especialmente palpables en un liderazgo femenino.
Las líderes suelen destacar por su iniciativa, integridad, la inspiración en sus equipos de trabajo y la obtención de resultados. Según demuestran diversos estudios, las compañías que tienen al menos un 30% de presencia femenina en altos puestos ejecutivos tienen un 15% más de beneficios que aquellas que no las tienen.
Sin embargo, las habilidades de las mujeres directivas no parecen ser suficiente todavía para derribar ciertos estereotipos que persisten en la actualidad. “Es imperativo derribar estereotipos que todavía persisten en torno a la persona líder y que están impidiendo a muchas mujeres alcanzar los puestos que se merecen”, apunta Grañó.
Una de esas barreras es la maternidad, motivo por el cual muchas experimentan el llamado “sentimiento de culpabilidad maternal». Sin embargo, no hay evidencia que haga certero el dicho de “ser madre resta”.
Esto puede relacionarse también con lo poco que se habla sobre la aportación de una directiva y madre en puestos de responsabilidad en las empresas y en su hogar. No obstante, una teoría del profesor James Heckman, Premio Nobel de Economía, demuestra que cuando una madre trabaja dentro y fuera de casa, los hijos adquieren un leguaje más rico y en el caso de las hijas, aumentan las probabilidades de trabajar y optar por puestos bien remunerados.
Las investigaciones de Heckman también apuntan a que los progenitores de madres que trabajan fuera de casa obtienen significativamente más educación que aquellos de madres que no lo hacen. En conclusión, ser madre trabajadora no resta a los hijos, sino todo lo contrario.
Sectores y mujeres
La otra perspectiva que analiza el informe de OBS es la sectorial. Lógicamente, hay diferencias en las actividades económicas, según se observa en el trabajo de Grañó.
Para empezar, la docente asevera que en el mundo académico persiste la brecha de género. Así como se observa un mayor número de estudiantes mujeres en grado y máster, la cuota de profesoras universitarias y rectoras es del 29% y 20%, respectivamente.
Sobre las diferencias en las titulaciones, es notorio el contraste que existe en estudios de Enfermería, Trabajo Social y Educación con las disciplinas STEM, cuya cuota si sitúa por debajo del 20%. Traducido a la actividad laboral, en el área de investigación las mujeres solo representan el 28% del total en el mundo.
En otros sectores como el asegurador, solo el 23% de los puestos de los consejos de administración son ocupados por mujeres. En el deporte, si bien existe una participación muy amplia, también parece haber un techo de cristal en el acceso a puestos directivos o la igualdad de salarios.
Pero no todo deben ser malas noticias respecto al binomio mujer y liderazgo. Hay datos muy positivos en actividades como el tercer sector.
La presencia femenina en los patronatos y juntas directivas de las organizaciones no lucrativas (tercer sector) en España roza la paridad, siendo mujeres el 49% de sus miembros
Según afirma la Fundación Lealtad en su último estudio “La presencia femenina en el Tercer Sector”, la presencia femenina en los patronatos y juntas directivas de las organizaciones no lucrativas de nuestro país roza la paridad, siendo mujeres el 49% de sus miembros.
Asimismo, su protagonismo en la dirección ejecutiva de las entidades es superior al masculino, con un 53% las ONG españolas que están dirigidos por una mujer.
El Tercer Sector emplea en la actualidad a 528.000 personas, y según los datos de la Plataforma de ONG de Acción Social, de ellas, el 78% (casi 8 de cada 10) son mujeres de diversos perfiles que desempeñan las diferentes actividades requeridas por esas organizaciones: desde la parte más administrativa o de gestión de proyectos hasta asesores, terapeutas, educadores, etc.