Laura Castela es la responsable de 42Madrid, un proyecto que ha acogido recientemente Fundación Telefónica con una metodología formativa rompedora. Una especie de academia del talento digital en programación, cuya eficacia está contrastada en los diversos países en los que está presente, ya que todos los alumnos terminan por recalar en una empresa.
Una escuela sin clases, profesores, sin límite de edad, abierta 24/7, gratuita y con una metodología revolucionaria. ¿En qué consiste dicha metodología y qué beneficios puede aportar en España 42Madrid?
Efectivamente, es una metodología diferente a lo que estamos acostumbrados a ver, de entrada es un cambio de filosofía y un cambio de mentalidad. Lo que puede aportar es un nuevo paradigma de la educación.
Es un campus que está abierto las 24 horas del día, siete días a la semana y donde el alumno es el protagonista de su ritmo de aprendizaje. Esto es realmente lo importante y diferenciador.
Si asumimos que todas las personas son distintas y que cada uno aprende a su manera, en un mundo tan cambiante no tiene mucho sentido que los alumnos aprendan al mismo ritmo, tengan el mismo currículum, etc.
En 42, el alumno entra y decide qué quiere estudiar, cuándo, a qué ritmo y cuándo hace los exámenes. Todo está trabajado entre pares de forma gamificada, por tanto eliminamos la competitividad y para poder avanzar, los propios alumnos tienen que colaborar entre ellos.
Todo lo que se estudia en 42 son competencias que actualmente se están demandando en el mercado laboral, de modo que un alumno va a estar preparado para cubrir cualquier perfil digital en demanda.
Otro concepto novedoso es que el alumno va a aprender a aprender, con el objetivo de que cuando esté en una empresa se adapte fácilmente y pueda trabajar en cualquier proyecto.
42, un método para contagiar a la educación en España
Con todo, esperamos que 42 cause un efecto contagio a la educación, para que ésta se actualice y se transformen los docentes al ritmo del mundo VUCA.
Todo lo que se estudia en 42 son competencias que actualmente se están demandando en el mercado laboral, de modo que un alumno va a estar preparado para cubrir cualquier perfil digital”
El mismo José María Álvarez-Pallete ha estado muy pendiente de la incorporación y desarrollo de 42. Eso da una pista de la importancia que le da Telefónica al proyecto…
Nuestro presidente es uno de los primeros prescriptores del proyecto, lo cuenta allá donde va y ha confiado en él desde el principio. Con 42Madrid, Telefónica y su Fundación muestran una vez más el potencial de la tecnología como creadora de oportunidades poniendo a las personas en el centro de la revolución digital en la que estamos inmersos para que nadie se quede atrás.
Uno de los reclamos más importantes a nivel social es que sea un aprendizaje gratuito. Agotada la primera convocatoria, ¿qué expectativas de asistencia tienen con este modelo y cuándo serán las próximas convocatorias?
En esta primera convocatoria hemos superado todas nuestras expectativas. Tras el lanzamiento de 42Madrid, en 48 horas ya teníamos 8.000 personas inscritas y a día de hoy rondan las 13.000.
La primera convocatoria, que realmente es la primera piscina, constaba de dos procesos de selección; el primero es la inscripción online y después es el proceso de preselección, que dura 26 días, programando casi 10 horas al día. No se accede por nota, sino por actitud.
En octubre, abrimos una segunda piscina y a los candidatos les avisaremos unos días antes para llevar a cabo un procedimiento similar.
En este campus se aprenden tanto hard skills, técnicas para proyectos digitales, como también las soft skills”
Más allá de la formación técnica en programación, ¿qué otras habilidades cultivan los que accedan a esta academia?
Para acceder a 42Madrid hay que tener muchísima actitud, ser muy autodidacta y perseverante. En este campus se aprenden tanto hard skills, técnicas para proyectos digitales, como también las soft skills: trabajo en equipo, creatividad, comunicación, resiliencia, flexibilidad… Son habilidades que realmente están demandando las empresas en el mercado.
Un proyecto nacido en París y ahora extendido por el mundo
El proyecto nació hace seis años en París y desde entonces se ha ido extendiendo por el mundo hasta llegar ahora a Madrid. ¿Tiene algún balance de todos estos años para saber el impacto de esta escuela a nivel global?
La cifra más importante que podemos dar es que 42 tiene una tasa de empleabilidad del 100%. Este dato fue uno de los que más nos convenció cuando decidimos apostar por este proyecto desde Fundación Telefónica.
Todas las personas que han pasado por 42 en el mundo han encontrado un empleo. En París, los alumnos reciben una media de ocho ofertas de empleo durante su periodo de formación. Esto quiere decir que las organizaciones están interesadas por los alumnos prácticamente desde que empiezan.
Es un proyecto de origen francés, pero parece inspirado en ejemplos de Silicon Valley, con libertad para el descanso, ocio… ¿No es una cultura muy acotada para nosotros?
Sí, la mentalidad es un poco similar, pero nos vamos a diferenciar mucho de estos espacios. 42 quiere distanciarse de las escuelas o universidades más tradicionales, pero al mismo tiempo no queremos que sea como una oficina.
Es un espacio donde la gente va a convivir y esto es lo más importante. Se va a estudiar, pero también creemos en la desconexión digital por eso también es clave que los alumnos se levanten del ordenador y descansen. Hay zonas para ello, e-sports, cantina e incluso duchas porque las personas pasan mucho tiempo aquí.
Estamos diseñando una academia en la que apetezca entrar y en la que apetezca quedarse. Pretendemos que sea un entorno vivo, no solo accesible para los alumnos sino para empresas (con la celebración de eventos), curiosos y personas que se interesen en conocer qué es esto de 42.
Para el año 2020 en Europa se van a generar casi dos millones de empleos nuevos digitales, por lo tanto viene mucha demanda, pero no estamos preparados”
Dice academia y alguno ya ha comparado a 42 como una especie de OT del talento digital…
¿Un OT de la programación? Sí, es divertido ese símil, pero la realidad es que los alumnos no pueden dormir allí porque no está concebido como una residencia. Eso sí, cada cual va el tiempo que quiera.
¿Cree que este tipo de métodos se pueden implantar en instituciones más tradicionales como la Universidad? ¿Hay un gap muy grande con el entorno universitario en este país?
Desde 42 planteamos una estructura alternativa, donde al alumno desde el primer día elige su currículum, los proyectos en los que trabajar, las competencias que adquirir, el horario al que ir a la academia y la fecha de sus exámenes.
Nosotros creemos que se podría implantar una metodología similar en la universidad, pero para eso tendrían que cambiar muchas cosas, entre ellas las estructuras, la mentalidad, asuntos administrativos, la comunidad docente…
Usted está ligada a la Fundación Telefónica desde años en cuestiones de formación y empleabilidad. Seguramente sea de las que piensen que la tecnología va a crear más empleo del que pueda destruir…
Absolutamente. Existe mucho miedo a que toda la tecnología vaya a destruir el empleo, pero nosotros creemos que se va a transformar. Es cierto que hay muchos trabajos que se van a automatizar, eso ya lo estamos viendo, pero alguien tiene que construir esa máquina, que programarla y que arreglarla.
Por tanto, surgen nuevos proyectos. Estamos en un momento de cambio y probablemente una de las revoluciones más grandes que ha conocido la historia, con un ritmo muy acelerado nosotros lo vemos como una oportunidad. Nuestra tarea con 42 es formar a las personas para todos estos empleos que se están transformando.
Casi el 80% de los estudiantes universitarios van a trabajar en profesiones que todavía no existen. Más datos, 2018 cerró con casi 300.000 puestos de trabajo sin cubrir por falta de competencias digitales.
Además, para el año 2020 en Europa se van a generar casi dos millones de empleos nuevos digitales, por lo tanto viene mucha demanda, pero no estamos preparados. Para todo ello nos tenemos que formar.
¿Cómo y cuándo cree que cambiará la tendencia respecto a la baja titulación en carreras STEM que se da en las mujeres?
Por suerte, esta tendencia está empezando a cambiar, pero es cierto que las cifras no son las esperables. En 42 la media en otros países está en un 10% de mujeres estudiando y nosotros en Madrid superamos esa media ya en las inscripciones. De las 13.000 personas inscritas, un 25% son mujeres y de las personas que han superado el segundo test, un 15% de ellas son mujeres.
Desde Telefónica estamos muy comprometidos con el papel de la mujer en empleos y carreras STEM, así como su inclusión en puestos directivos y fruto de ello es la cantidad de proyectos que tenemos dedicados a esta cuestión desde hace años. Yo misma puedo servir de ejemplo, al estar el frente de la escuela más innovadora de España.
