La empresa tecnológica estadounidense Google se acerca a un pacto con la Comisión Europea para corregir las prácticas que preocupan a Bruselas y evitar así una fuerte multa por abuso de posición dominante en el mercado de búsquedas a través de Internet.
BRUSELAS, 25 (EUROPA PRESS)
La empresa tecnológica estadounidense Google se acerca a un pacto con la Comisión Europea para corregir las prácticas que preocupan a Bruselas y evitar así una fuerte multa por abuso de posición dominante en el mercado de búsquedas a través de Internet.
«Planteamos cuatro objeciones basadas en nuestra investigación abierta a finales de 2010 y posteriores quejas. Sobre estas cuatro objeciones, Google acepta encontrar soluciones. Exploraremos técnicamente el tipo de soluciones que Google nos presente y espero que podamos alcanzar un acuerdo», ha explicado el vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia.
«Nos han dado suficientes explicaciones para continuar con reuniones técnicas a fin de explorar la posibilidad de una solución negociada», ha indicado.
No obstante, Almunia ha avisado de que no excluye que «en el futuro, otros aspectos de la actividad de Google sean también investigados», en particular la búsqueda a través de apps para dispositivos móviles como teléfonos o tabletas.
El vicepresidente de la Comisión no ha dado ningún detalle sobre las medidas correctivas ofrecidas por Google, aunque se ha mostrado convencido de que los dirigentes de la compañía «tienen razones para pensar que vale la pena» seguir con este proceso con el fin de evitar las sanciones. Tampoco ha precisado ningún plazo para cerrar un pacto, aunque ha dejado claro que será de alcance mundial y no sólo para la UE.
El Ejecutivo comunitario, que lleva investigando a la empresa estadounidense desde noviembre de 2010, identificó a finales de mayo cuatro áreas en las que ha detectado prácticas que pueden considerarse abuso de posición dominante.
Almunia pidió entonces a Google que presentara en cuestión de semanas propuestas con el fin de lograr una solución negociada y no seguir adelante con el procedimiento sancionador. El presidente de la compañía, Eric Schimdt, respondió a este llamamiento con una carta con propuestas a principios de junio.
La primera cuestión que preocupa a Bruselas es que, en los resultados de sus búsquedas, Google ofrece vínculos a sus propios buscadores especializados, por ejemplo en restaurantes o en noticias y les da un «trato preferente» respecto a herramientas similares de sus rivales.
Además, según Bruselas, Google copia contenido original de las webs de sus rivales, por ejemplo reseñas de restaurantes, sin autorización previa. En tercer lugar, la Comisión está preocupada por los acuerdos de «exclusividad de facto» firmados entre Google y sus socios en los sitios web donde Google incluye anuncios de búsquedas, que impiden también la entrada de rivales.
Finalmente, Almunia ha denunciado las restricciones que Google impone a la portabilidad de campañas de anuncios de búsquedas desde su plataforma AdWords a las plataformas rivales.