berdrola, a través de su filial estadounidense Avangrid, ha dado un nuevo paso en su expansión internacional al adjudicarse un contrato para construir el parque eólico marino New England Wind 1, un proyecto clave dentro del plan de energías renovables del país. El parque proporcionará 791 megavatios (MW) de energía limpia y libre de emisiones a Massachusetts, lo que equivale a abastecer a 400.000 hogares, una cifra superior a la población combinada de Málaga y Bilbao.
Este nuevo parque no solo contribuirá al objetivo de descarbonización del país, sino que también reducirá las emisiones de gases de efecto invernadero en un volumen equivalente a retirar 300.000 vehículos de combustión de las carreteras cada año. Además, se espera que el proyecto cree más de 4.400 empleos y aporte 3.000 millones de dólares a la región de Nueva Inglaterra, fortaleciendo la economía local a través de infraestructuras como un nuevo puerto en Salem y una planta de fabricación de energía eólica en New Bedford, ambas en Massachusetts.
Un avance en la transición energética
El proyecto New England Wind 1 se enmarca dentro de la visión global de Iberdrola de liderar la transición energética y la independencia de los combustibles fósiles. Este nuevo parque permitirá a la compañía seguir consolidándose como un referente en el sector de la eólica marina, una tecnología que ha experimentado un crecimiento significativo en las últimas décadas y que es clave para reducir las emisiones de carbono en todo el mundo.
Cuando el parque entre en funcionamiento, alrededor de 2029, será un hito en el camino hacia una energía más sostenible, alineado con los objetivos de Estados Unidos de reducir su huella de carbono. La construcción de New England Wind 1 comenzaría en 2025, siempre que se firme y apruebe un acuerdo de compra de energía (PPA).
Iberdrola y la eólica marina: un compromiso global
El compromiso de Iberdrola con la eólica marina no es nuevo. La compañía lleva dos décadas apostando por la energía eólica terrestre, siendo pionera en su desarrollo, y ahora también lidera el camino en el ámbito de la energía eólica offshore. Este nuevo parque, New England Wind 1, se sumará a otros proyectos que Iberdrola ya tiene en marcha en todo el mundo.
Uno de estos proyectos es Vineyard Wind 1, también en Estados Unidos, que generará electricidad para más de 400.000 hogares en Massachusetts y creará 3.600 empleos. Además, ahorrará a los consumidores 1.400 millones de dólares en los primeros 20 años de operación y reducirá las emisiones de carbono en más de 1,6 millones de toneladas métricas al año.
En el Reino Unido, la filial de Iberdrola, ScottishPower, fue adjudicataria esta semana de dos contratos en la sexta ronda de subastas de contratos por diferencia, incluyendo el parque eólico East Anglia Two. Ambos proyectos suministrarán 1.000 MW de energía limpia a más de un millón de hogares.
Crecimiento e inversión global
A cierre del primer semestre de 2024, Iberdrola ya contaba con 2.300 MW de capacidad instalada en proyectos de eólica marina. La compañía prevé alcanzar los 3.000 MW en 2025 y los 4.800 MW en 2026, consolidando su liderazgo en el sector a nivel mundial. Este crecimiento viene acompañado de importantes inversiones que abarcan múltiples países y regiones.
Entre los proyectos más destacados de Iberdrola se encuentran los parques eólicos East Anglia One, East Anglia Two y East Anglia Three en el Reino Unido, Saint Brieuc en Francia, y tres parques en el mar Báltico: Wikinger, Baltic Eagle y Windanker. Estos proyectos son fundamentales para el avance de la compañía en su apuesta por las energías renovables y por reducir la dependencia de los combustibles fósiles.
Beneficios económicos y medioambientales
El parque New England Wind 1 no solo ayudará a Estados Unidos a avanzar en sus objetivos climáticos, sino que también traerá significativos beneficios económicos a la región de Nueva Inglaterra. La construcción de infraestructuras como el puerto en Salem y la planta en New Bedford impulsará el desarrollo local, al tiempo que se crearán 4.400 empleos directos relacionados con el proyecto.
Además de los beneficios económicos, los impactos medioambientales del proyecto serán igualmente notables. El nuevo parque reducirá considerablemente las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que contribuirá a mitigar el cambio climático. En términos comparativos, la reducción de emisiones será equivalente a retirar 300.000 coches de las carreteras cada año, lo que tendrá un efecto positivo en la calidad del aire y en la salud de la población.
Proyectos futuros y expansión continua
Con una presencia creciente en todo el mundo, Iberdrola sigue apostando por la innovación y el desarrollo de energías renovables. Su expansión en el sector de la eólica marina es solo uno de los muchos frentes en los que la empresa está trabajando. A medida que continúan desarrollándose proyectos en Europa, América y Asia, la compañía se posiciona como un actor clave en la lucha contra el cambio climático y en el avance hacia un futuro energético más sostenible.
La construcción de New England Wind 1 y otros parques eólicos marinos representa una oportunidad para avanzar en la transición hacia las energías limpias, creando empleo y aportando valor económico a las regiones donde se desarrollan. A través de sus esfuerzos continuos, Iberdrola se mantiene en la vanguardia de la energía eólica marina y continúa siendo un líder en la producción de energía limpia y renovable.
En resumen, el proyecto New England Wind 1 es otro paso en la estrategia global de Iberdrola para liderar el mercado de las energías renovables, consolidando su presencia en Estados Unidos y posicionándose como un jugador clave en la transformación energética global.