Durante el estado de alarma, la figura del asistente virtual es clave en labores administrativas. La demanda de estos profesionales se ha duplicado debido al aumento del teletrabajo.
Los hábitos laborales han cambiado y aunque muchos profesionales han vuelto a sus puestos de trabajo físicos, el teletrabajo sigue siendo una fórmula para muchos otros. En esta tendencia, hay un profesional que está siendo demandado por muchos organizaciones. Se trata del asistente virtual.
Es un perfil imprescindible para el funcionamiento de cualquier empresa que realiza tareas administrativas, creativas y/o técnicas en remoto para diversas empresas y clientes.
De acuerdo con el estudio realizado por la mayor plataforma de empleo independiente Freelancer.com 2019 la demanda de este perfil aumentó un 31%. Este estudio analizó el comportamiento de contratación de empleados de más de 38 millones de empresas en 247 países. Las empresas consideran que es más eficiente y más productivo contratar asistentes virtuales freelance en lugar de tener un asistente interno.
Alta demanda del asistente virtual
Ahora, durante la crisis, la demanda de esta figura se ha duplicado. Los empleadores se han dado cuenta del valor de la externalización de sus necesidades técnicas, creativas y administrativas.
«Sin esta figura, muchas empresas estarían perdidas. Gestiona el mail, las redes sociales, puede encargarse de la facturación, de redactar informes, de crear posts para webs o blogs, del diseño de imágenes o banners publicitarios o hasta de la edición de vídeos o de podcast. Necesita desarrollar gran cantidad de competencias para ofrecer servicios mucho más amplios y completos”, afirma Esther Mayor, formadora de nuevos asistentes virtuales en su Instituto de Asistencia Virtual por donde han pasado ya más de 300 alumnos.
El 100% de las empresas necesita o necesitará este perfil en su plantilla. La crisis del covid-19 ha puesto de manifiesto que el teletrabajo es el futuro, pero que los empleados y sus proyectos tienen que estar coordinados o todo sería un caos. Y no solo eso: su perfil es tan polivalente que siempre tiene algo que aportar. Su perfil proactivo les ha permitido a las empresas ahorrar gastos con la realización de actividades múltiples. Ellos son la respuesta que buscan los altos ejecutivos y las empresas que quieren delegar tareas administrativas, creativas y técnicas, para dedicarse a en estos momentos a gestionar la crisis y retos que afrontan»
Esther Mayor
