Apuesta por fomentar los planes privados de pensiones con incentivos fiscales o con la progresiva reducción de las cotizaciones sociales
SEVILLA, 12 (EUROPA PRESS)
El socio director de Sagardoy Abogados, Martín Godino, ha calificado la reforma laboral como «insuficiente, descafeinada y de poco alcance», ya que «no está consiguiendo ninguno de los objetivos que se planteaba», como son la reducción de la tasa de desempleo y de la temporalidad.
En un encuentro informativo, Godino ha subrayado que en la reforma laboral «ha faltado valentía para tratar algunos temas» y propone el establecimiento de un estatuto para las pymes, al no tener sentido aplicar la misma normativa que a las grandes empresas, con contrataciones y extinciones «más ágiles para fomentar la creación de empleo». También, aboga por la «flexibilidad interna» ante la crisis, permitiendo adaptar las condiciones de trabajo ante coyunturas económicas complicadas.
Además, apuesta por ir hacia un modelo de contratación «más sencilla», el contrato único, para evitar el «fraude existente», teniendo en cuenta que el 90 por ciento de los contratos son temporales, aunque «las labores desempeñadas no se corresponden en ocasiones con esa temporalidad». «No puede crearse protección para los indefinidos, con salidas tempranas por prejubilaciones, y desprotección para los jóvenes, sino que todos los contratados deben tener los mismos derechos y obligaciones», concluye.
En cuanto a la negociación colectiva, Godino apuesta por la limitación de la prórroga de los convenios una vez vencidos, como elemento de «dinamización» de la negociación, y por la facilidad para adaptar los convenios sectoriales a las situaciones concretas de cada empresa, mientras que los sectoriales marcarían las líneas generales de desarrollo.
REFORMA DE LAS PENSIONES «INCUESTIONABLE Y NECESARIA»
Godino deja claro que la reforma del sistema de Seguridad Social en España era «incuestionable y necesaria», ya que actualmente existen tres cotizantes por cada pensionista y en 2050 será 1,5 cotizantes, lo que supone una «situación extrema». Además, las pensiones pasarían de consumir el nueve por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) nacional al 15 por ciento en 2050.
«No se trata de cambiar de modelo, sino de racionalizarlo, reforzando la contributividad, siendo más proporcional a lo que cada uno cotiza, y reduciendo la cobertura», añade, tras afirmar que las pensiones futuras serán entre un 15 y un 20 por ciento menores a las actuales. Así, recuerda que la tasa de cobertura en España es superior al 80 por ciento, mientras que la media europea se sitúa en el 50 por ciento.
Además, valora la apuesta por reducir las prejubilaciones, «dificultándolas y encareciéndolas», para que se posibiliten otras medidas de adaptación como reducción de jornadas o bajas incentivadas. «Es la reforma mejor orientada y consolidará el sistema para los próximos 20 años», concluye.
En este sentido, apuesta por fomentar los planes privados de pensiones con incentivos fiscales o con la progresiva reducción de las cotizaciones sociales. «No se trata de realizar cambios estructurales al sistema, sino de medidas adicionales», añade Godino, que recuerda que actualmente hay diez millones de partícipes de los planes privados de pensiones, pero que el fondo acumulado presenta una media de 10.000 euros.