La biodiversidad está en serio peligro y urge abordar este problema desde un punto estructural: un millón de especies se encuentra en peligro de extinción de un total de ocho millones. Este fue el mensaje que se ha lanzado en una jornada específica sobre este asunto organizada por Fundación Naturgy y el Capítulo Español del Club de Roma.
Las dos protagonistas del evento han sido Elena Pita, directora de la Fundación Biodiversidad del MITECO, y Paloma Fra, abogada y experta en financiación pública europea de Biocarbon Estates, un fondo pionero en la lucha contra el cambio climático y la conservación de la biodiversidad. Ambas expertas trataron de dar la receta para mejorar la gestión de la biodiversidad. Más allá del cuidado de las especies animales, ambas comparten que tras esa gestión existe un modelo económico sostenible en su término más amplio.
Muchas especies de animales en peligro de extinción
“Para valorar hasta qué punto es grave la pérdida de biodiversidad basta tener en cuenta el dato de que un millón de especies están en peligro de extinción sobre un total de ocho millones”, ha señalado Pita. “Las causas directas tienen que ver con la sobreexplotación de recursos, la contaminación, proliferación de especies invasoras, deforestación, etc. Pero el motivo detrás de estas causas directas es el modelo de producción y consumo que no es sostenible. Si queremos ir al origen del asunto necesitamos de una respuesta compleja, amplia y que implique a todos los sectores de la sociedad”.
Tratándose de un cambio de carácter estructura, Pita alude a un cambio de mentalidad desde el punto de visto colectivo, lo cual es bastante complejo.
La medición de la biodiversidad
Ambas especialistas destacaron la importancia de con métricas avanzadas para el progreso de las metodologías y el diseño de medidas dirigidas a combatir la pérdida de la biodiversidad.
“Medir el impacto económico de los servicios ecosistémicos es fundamental para poder valorar las soluciones basadas en la naturaleza. Hasta que no lo valoricemos, será difícil impulsar un cambio del modelo de negocio”, explica Pita.
La portavoz de la Administración también ha señalado que “hay barreras metodológicas que tienen que ver con las métricas, que cobran cada vez más relevancia. En ocasiones, las iniciativas no cuajan porque es difícil tener una métrica y un seguimiento sobre ellas”.
Sin duda, el objetivo es claro: revertir el daño causado a la biodiversidad, pero su abordaje es muy complejo por problemas como la la propia dificultad de los desafíos climáticos y la negociación de todos los países, como partes involucradas. En ese modelo de gobernanza se han producido avances, según ha expresado Pita pero la la gobernanza es complicada con múltiples niveles, tal y como sucede con la aprobación paralela del acuerdo mundial Kunming- Montreal, el pacto verde europeo y los planes nacionales.
El rol del sector privado y el punto sobre las Pymes
En cuanto a la participación de las compañías privadas, Fra ha resaltado que “la inversión privada es necesaria para extender las soluciones a todo el territorio. Las empresas más avezadas van a querer reportar de forma voluntaria porque esto les va a permitir compararse con un criterio homogéneo. Pero, para ello, es necesaria la participación del punto de vista financiero. Si las empresas no pueden valorar sus esfuerzos en este ámbito, no podrán ponerlo en valor”.
En ese sentido, Pita ha hecho mención a las disparidades en el enfoque entre compañías de distintos tamaños. “Hay una brecha entre las grandes empresas, en las que los temas sobre biodiversidad están muy interiorizados, y las pequeñas y medianas empresas a las que les afecta este tema, pero con las que todavía hay que hacer una labor de difusión del discurso”. Para Fra, “tenemos que poder demostrar a las pequeñas y medianas empresas que las acciones que hagan a 50 años tendrán una serie de beneficios que les retornarán, para que puedan sentirse también beneficiadas. Es necesario establecer un flujo de recursos entre todos los actores para poner en igualdad de condiciones a todas las empresas, independientemente de su tamaño”.