Como profesionales, ¿qué aportamos para justificar nuestra pertenencia a una organización o nuestra formación? ¿Quién no ha descolgado su título en alguna ocasión para fotocopiarlo y compulsarlo? Y, en los procesos de selección, ¿cómo contrastamos y verificamos la autenticidad de una membresía o formación de un candidato?
En la actualidad disponemos de certificaciones digitales, insignias abiertas que representan una versión digital de una credencial, membresía, certificación o resultado de un aprendizaje que se puede verificar en tiempo real y en línea.
Cada certificación digital consta de dos partes: Una imagen que representa gráficamente el logro alcanzado y los datos específicos que permiten validar el origen, el emisor, la autenticidad y otras características relevantes del logro alcanzado.
Puede mostrar el logo de la institución que otorga la insignia, título de la certificación, competencia o logro, nombre del acreditado, nombre del emisor, fecha de emisión y expiración, descripción del logro, competencia o resultados del aprendizaje, requisitos que se deberán cumplir para lograr la acreditación, entre otros.
En este sentido, permiten representar logros de organizaciones y profesionales en forma gráfica y aglutinan una serie de datos asociados que aportan información adicional de gran valor para quien la recibe, ya sea un profesional independiente o una organización.
En el CEG hemos iniciado un proceso de emisión de certificaciones digitales porque consideramos que es crucial, más cuando las falsificaciones y/o malas prácticas están a la orden del día y cuando la IA es capaz de ofrecer resultados casi genuinos
Las insignias son archivos de imagen digitales que están vinculados de forma única a los datos alojados en una plataforma. El enlace que se genera de datos verificados los hace más confiables y seguros que un certificado en papel eliminando la posibilidad de que cualquier persona opte por una insignia y su identidad asociada.
La seguridad de las certificaciones digitales
Las versiones digitales de las certificaciones están basadas en el estándar de insignias abiertas definido por IMS Global, lo que permite que se puedan compartir online. Se trata de la forma más segura y eficiente de comunicar buenos resultados a través de las redes sociales y por correo electrónico, y ofrecen un método confiable para la verificación de las certificaciones en tiempo real.
Este sistema complementario a la certificación en papel tradicional, que ayuda a mejorar la accesibilidad y la comunicación en cualquier momento y desde cualquier lugar, se convierte en una apuesta segura en estos momentos de cambio y revolución tecnológica.
Ventajas de las certificaciones digitales:
- Validación de habilidades y competencias ya que sirven como una confirmación formal de las habilidades y competencias adquiridas por un profesional.
- Certificación de pertenencia al garantizar la pertenencia a una membresía, a una asociación o agrupación.
- Mejora la credibilidad y confianza de un profesional, empresa u organización.
- Proporciona mayor visibilidad en el mercado en los distintos sites online y offline.
- Ventaja competitiva en el mercado laboral porque diferencia a un profesional de otros candidatos.
En el Club Excelencia en Gestión hemos iniciado un proceso de emisión de los reconocimientos en formato de certificaciones digitales a organizaciones que obtienen el Sello EFQM o forman parte de la Red de Expertos EFQM (REDEX), y a profesionales que gracias a su formación y experiencia pertenecen al Club de Evaluadores del Club Excelencia en Gestión o son miembros de Amigos de la Excelencia.
¿Por qué? Porque consideramos que es crucial tener una versión digital de un reconocimiento internacional y de referencia como es el Sello EFQM, entre otros, en tiempo real, desde cualquier lugar y online. Más cuando las falsificaciones y/o malas prácticas están a la orden del día y cuando la IA es capaz de ofrecer resultados casi genuinos.
Sin lugar a duda, las certificaciones digitales han venido para quedarse