Durante la pandemia y tras ella, hemos comprobado que la hostelería ha adaptado sus cartas y menús en formato digital gracias al QR. Ya nos hemos acostumbrado a fotografiar este código para saber qué podemos tomar en un establecimiento de comida. No obstante, esta opción tenía margen de mejora tal y como han demostrado los emprendedores José Francisco Santos Fernández y Jorge Fernández Alonso.
Ambos empresarios han desarrollado la que es la única carta gastronómica que presenta los platos con un vídeo interactivo. Esta herramienta se llama Gourmeats y ya está arrasando entre los grandes chefs de este país. “Comer por los ojos” es una opción muy atractiva y además está científicamente validada. Un estudio de la Universidad de Granada demuestra que los platos bien presentados activan el placer y la Universidad de Oxford confirma que “comer por los ojos” es más un hecho que una expresión, el cerebro crea vínculos afectivos con platos bien procesados y presentados aumentando el deseo de comer.
Desde el ámbito de los especialistas en nutrición, aseguran que esta opción hace que los platos sean más apetecibles. La dietista Nekane Ullán indica que “comer por los ojos” no significa comer sin medida y con un hambre voraz, sino de combinar ingredientes de distintos colores para hacer platos apetecibles y así disfrutarlos al 100%.
Un proyecto nacido de emprendedores procedentes del sector financiero
Como muchas historias del ecosistema emprendedor, Goumeats nace de la idea de dos emprendedores ajenos a los hotelería y la alimentación. Francisco y Jorge llevaban años trabajando en el sector financiero y de servicios y en 2021 se lanzan a desarrollar esta aplicación para que la hostelería pudiera conectar mejor con los consumidores. “Nuestro objetivo era desarrollar un producto sencillo, intuitivo, diferenciador y donde prevalezca la autonomía del restaurante”, señala José Francisco Santos.
EL resultado, desde el punto de vista técnico, es una solución muy sencilla para comercios y comensales. A través de un nuevo código QR del restaurante se puede comprobar el detalle de cada plato de la carta, su elaboración, el nombre, descripción, precio, alérgenos, cantidades disponibles y sugerencias del chef. “La foto de un plato en una carta se ha quedado obsoleta, el usuario requiere interacción”.
En el panel de administración, el restaurante puede gestionar toda la carta en tiempo real, con opciones que van desde la política de precios, el stock o añadir nuevos platos.
“Los restaurantes con el objetivo de satisfacer una necesidad en sus salas, contratan los servicios ofrecidos por Gourmeats para mejorar la experiencia de sus clientes y reforzar su estrategia digital. Los comensales acceden a través del código QR, consumen contenido visual de calidad, resuelven sus dudas sin tener que preguntar al camarero y abren su mente para probar nuevos platos”, indica Jorge Fernández Alonso. “En nuestra propuesta de valor, Gourmeats cubre la producción de los videos de todos los platos que componen la carta del restaurante, por lo que se asegura un contenido de alta calidad, que muestra el trabajo del chef y la realidad de cada plato”, puntualiza José Francisco Santos Fernández.
El impacto que ya está teniendo Gourmeats
En cuanto a rendimiento, además de la experiencia que se ofrece a todos los tipos de clientes de la aplicación, los empresarios aseguran que desde su puesta en marcha se ha producido un mayor consumo y un aumento del ticket medio de entre 4-5 euros por persona.
Uno de los casos de uso del QR Gourmeats se da en un conocido restaurante asiático de Madrid. Jesús Castells Navarro, director general de Art & Sushi Madrid, reconoce que la herramienta ha ayudado mucho a aclarar a los clientes cualquier duda con relación a los platos. “Al ser un restaurante japonés, en ocasiones los clientes no conocían alguno de nuestros productos y gracias a la carta en video, todas esas dudas han desaparecido. Además, el Panel de Administración que gestiona el QR, nos permite actualizar directamente cualquier información de nuestros productos sobre la marcha. Cuando nos quedamos sin materia prima de alguno de nuestros productos con un simple clic lo ocultamos de la carta QR”, matiza Jesús Castell.