La hostelería desescala y Lola Rúa tiene una idea creativa para el sector: mamparas disuasorias de diseño exclusivas. El proyecto Un jardín por frontera de esta arquitecta inmortaliza la Primavera de 2020 y además aporta la seguridad e higiene que necesitan los bares y restaurantes en estos momentos.
¿Cómo surge la idea de Un jardín por frontera?
La idea surge a partir de la necesidad de crear un elemento de protección y seguridad entre personas para los negocios que ofrecen servicios vinculados con la hostelería, restauración, ocio… donde la imagen de marca es una estrategia de venta muy potente, además de fundamental. Sentía que tenía que ayudar a mis clientes que tanto esfuerzo han puesto en hacer de sus locales unos espacios especiales y con alma.
Por otro lado, y con un punto de vista más sentimental, con las mamparas divisorias de diseño he querido rendir un homenaje a la primavera del 2020 y a sus flores. Las flores como símbolo de alegría, belleza, de unión y de celebración. De esta forma, logro un doble objetivo. Por un lado, ayudar al sector horeca y, por otro, al sector de las flores, plantaciones y viveros utilizando el excedente de flores que no se ha usado en estos meses de confinamiento, a la vez que impulsamos que el proyecto sea sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Mamparas que protegen de forma amable y elegante
¿Qué caracteriza al proyecto?
Gracias al diseño emocional y experiencial de espacios que potenciamos, hemos creado y producido unas piezas de protección con alma, únicas y exclusivas. Con ellas garantizamos la seguridad, protección e higiene, tanto de empleados como de clientes ofreciéndoles la posibilidad de separar de forma amable y elegante los espacios. Así fomentamos ambientes y experiencias que favorezcan la tranquilidad y confianza de los comensales y clientes mientras disfrutan cómodamente de los servicios que se les brinda, “abrazados” por la primavera de este año que hemos inmortalizado.
¿Cómo son las mamparas divisorias de diseño?
Las mamparas divisorias de diseño son instalaciones transparentes montadas sobre una estructuras ligeras portátiles y móviles para que se pueden mover fácilmente. Tenemos dos líneas. La de flores naturales en la que creamos las mamparas introduciendo las flores naturales mediante un trabajo de prensado y secado.
Y la segunda línea de mamparas la creamos con ilustraciones dibujadas a mano por artistas emergentes que evocan la primavera de una forma idílica.
Hemos diseñado y producido unas mamparas tipo acorde a las medidas estándares de mobiliario que se pueden combinar entre ellas y puedan formar pequeños habitáculos a medida según las necesidades de los clientes.
Están realizadas en policarbonato anti rayado y antiabrasión, embutido sobre una estructura de aluminio lacada en oro, cobre u óxido a elegir.
¿Por qué el sector de la hostelería y la restauración deberían apostar por tus instalaciones?
Entre todos debemos contribuir para hacer que la nueva normalidad sea maravillosa. Ir a un restaurante a comer u hospedarte en un hotel con las nuevas medidas de seguridad, hace que tus momentos sean más agradables si estás rodeado de flores que aportan elegancia, frescura y una buena dosis de energía positiva.
Además, las mamparas divisorias de diseño tienen múltiples usos como, por ejemplo, para crear áreas de reservado o espacios que requieran cierta privacidad por lo que la inversión en las mamparas ahora tiene una rentabilidad multiplicadora a corto, medio y largo plazo.
Utilidad para todo el sector horeca
El sector horeca es amplio, ¿te diriges a algún nicho en concreto?
Las mamparas de Un Jardín por Frontera van dirigidas a restaurantes, hoteles, tiendas de moda, espacios de venta o espacios públicos que deseen cuidar a sus clientes con un objeto de diseño muy exclusivo para alejarse de la frialdad que te genera una mampara al uso.
¿Cuál es el proyecto que destacarías de tu trayectoria profesional?
Todos los proyectos son destacables, porque me hacen crecer profesional y personalmente.
Si tengo que elegir uno me quedaría con el restaurante La Botillería, del Grupo Lezama, situado en la Plaza de Oriente de Madrid. Tuve la suerte de poder contar con un enclave histórico maravilloso, y basé mi proyecto en la evolución de la travesía del Arenal, una de las calles a las que da el local, que sus inicios era un arroyo que alimentaba la fuente de los caños del Peral (donde hoy está situado el Teatro Real). Basamos el proyecto en torno a esa agua, a sus propiedades de atraer la vida y a las personas. A sus cualidades de transparencia, reflejos, y sonidos. Estoy muy contenta con el resultado, con la satisfacción del cliente y con la buena acogida del consumidor final.
Ese “wow” que la gente dice cuando entra a los locales que he decorado es la sensación más gratificante que tengo como cerativa.
Sobre la emprendedora…
Lola Rúa es arquitecta especializada en interiorismo, instalaciones efímeras y decoración de eventos de alta gama, impulsora del “Diseño Emocional y Experiencial de espacios” y una emprendedora nata.
Fundadora y directora creativa de Efémera Studio desde 2013, crea el estudio con el objetivo de aportar valor emocional a los espacios y crear experiencias únicas que ayuden a las marcas a transmitir su insight, su esencia y su mensaje para potenciar el engagement con sus clientes, consumidores y usuarios actuales y potenciales.
Lola ha trabajado para marcas destacadas como Hugo Boss, Magerit, Acosta, Coca-Cola, Café de Oriente, La Botillería, Mercado de San Antón, Once y Consum, entre otras. Sigue creando proyectos fascinantes y creando espacios en distintas ciudades.
Su labor ha sido reconocida en varias ocasiones con el Premio YO DONA EMPRENDEDORA 2014 y Madrid Emprende, Primer Premio Escaparate de la Comunidad Madrid…