Las nuevas tecnologías y los sistemas de aprendizaje inteligentes pueden ser claves para reducir el número de ataques informáticos. La cuestión de la ciberseguridad empieza a tenerse muy en cuenta. Se trata de combatir el fraude a escala industrial.
En Europa, los ciberataques más comunes a las organizaciones son el robo de datos, robo de identidad y cuentas corrientes, tal y como se desprende de del informe EMEA Fraud Report 2019 de Experian, compañía tecnológica especializada en servicios crediticios, analítica avanzada y data, realizado por la consultora Forrester.
En España, el 62% de las empresas considera el robo de datos como el ataque más frecuente, y además el 41% de las organizaciones se han visto afectadas por el fraude interno, de empleados y retailers. Además 4 de cada 10 empresas considera el robo de identidad un problema importante al que se debe prestar atención.
¿Qué consecuencias tiene el fraude para las organizaciones?
En España el 36% de los encuestados considera que el impacto del fraude recae directamente en los controles de seguridad y en las auditorías internas, mientras que para el 32% el fraude se vincula directamente con la pérdida de clientes y el consecuente perjuicio reputacional. Y la medida para contrarrestar el impacto es apoyarse en el departamento de Customer Experience (29%).
Cómo la innovación empresarial consigue luchar contra el fraude
La tecnología se pone al servicio de la lucha contra el fraude. En España el 67% de las compañías tiene previsto invertir en tecnologías antifraude, como machine learning, IA o métricas de comportamiento, con el fin de prevenir el impacto del fraude para sus organizaciones.
Además, casi la mitad de los encuestados españoles (46%) prevé externalizar estos servicios a través de consultoría y servicios de terceros. Los equipos antifraude que conforman los departamentos tienen una media de 15 empleados.
Para conocer más sobre el fraude y la ciberseguridad, la siguiente infografía de Experian es bastante esclarecedora.