Ángel Corcóstegui, quien ha sido consejero delegado en BBVA o Banco Santander y fue fundador e inversor de Magnum Capital, junto a Carlos Tusquets, reconocido economista y fundador de FIBANC (Banco Mediolanum), quien presidió la Comisión Gestora del Fútbol Club Barcelona y actualmente líder de Trea Capital, Banco Mediolanum en España, la European Financial Planning Association (EFPA) e INVERCO, han debatido sobre el momento que atraviesa el sector de la banca en Encuentros Hotusa, un evento organizado por el Grupo Hotusa.
Amancio López Seijas, presidente de Grupo Hotusa, dio inicio al debate en el que se abordaron temáticas como la subida de tipos de interés, la situación de la industria bancaria española tras el prolongado proceso de consolidación llevado a cabo durante los últimos años y las nuevas opciones que ofrece el mercado en áreas de ahorro, pago y financiamiento.
Corcóstegui hizo un breve resumen de la situación económica mundial y a continuación hizo hincapié en España. A su juicio, para entender el momento actual es importante repasar los eventos que afectaron la economía en los últimos años, especialmente después de la crisis del 2008-2009.
«En España, tuvimos una deuda mayor que otros países, lo que llevó a una reestructuración del sector bancario y tomó mucho tiempo. No fue hasta el 2018 que se consideró el aumento de las tasas de interés, pero en 2020 el COVID llegó como una crisis devastadora a todos los niveles, y en 2021, cuando comenzábamos a recuperarnos, la guerra entre Rusia y Ucrania volvió a estancar la economía. Sin embargo, creo que este año no entraremos en recesión y saldremos poco a poco sin sufrir grandes pérdidas». Además, destacó que habrá una «desaceleración muy suave en las economías desarrolladas».
La necesidad de más innovación en la banca
Por su parte, Carlos Tusquets afirmó que ningún otro país en tan poco tiempo ha consolidado su sistema bancario como España lo hizo con 60 grupos y más de 100 bancos. Sin embargo, estas cifras han disminuido significativamente en la actualidad y ha destacado la necesidad de que el sector sea más innovador. Añadió que, aunque en los últimos años se han integrado indirectamente nuevos actores en el sistema de pagos, financiación y ahorro, la banca todavía posee la ventaja de su valiosa confianza con el cliente. A pesar del cierre del 60% de sus oficinas, la prioridad debe seguir siendo el cliente ya que perder su confianza significa perderlo para siempre, concluyó Tusquets.
Durante el encuentro, ambos participantes mantuvieron una postura similar y coincidieron en que el sector ha experimentado muchos cambios en las últimas décadas. Corcóstegui mencionó el ejemplo de Estados Unidos: «En EE. UU., cada banco tiene su especialidad. En España, los bancos se dedican a todo, desde financiación hasta la venta de seguros, hipotecas o fondos de pensiones. Pero eso resulta muy costoso».
Corcóstegui: «En EE. UU., cada banco tiene su especialidad. En España, los bancos se dedican a todo, desde financiación hasta la venta de seguros, hipotecas o fondos de pensiones. Pero eso resulta muy costoso»
Hace tres décadas, se era consciente del exceso de sucursales, pero se desconfiaba de las nuevas tecnologías. La banca online era solo un complemento para las sucursales y ahora es al revés, existen bancos digitales que cuentan con el apoyo de sucursales físicas, el modelo ha evolucionado». Además, destacó el «gran esfuerzo que se está realizando para lograr esta digitalización, pero implica costes muy elevados».
Por otro lado, Carlos Tusquets hizo hincapié en la gran dependencia de las empresas con este sector, proporcionando algunos datos: «En Europa, especialmente en España, el 80% de las empresas se financian con los bancos. Faltan inversores institucionales, cuando deberíamos facilitar su entrada en activos alternativos siguiendo el ejemplo de Italia».
En este sentido, Ángel Corcóstegui señaló: «Hay muchas empresas pequeñas aquí. Están por venir meses complicados en términos de financiamiento y una gran parte del mercado no podrá cubrir sus necesidades a mediano o largo plazo. Se otorgarán menos préstamos debido a la falta de liquidez y estos préstamos serán para las empresas más solventes».
Aun así, Corcóstegui se mostró optimista ante un futuro positivo del mercado y se aventuró a pronosticar «un escenario positivo, ya que antes de llegar a problemas graves, somos capaces de implementar acciones para evitar riesgos graves como las quiebras bancarias».
Corcóstegui : Están por venir meses complicados en términos de financiamiento y una gran parte del mercado no podrá cubrir sus necesidades a mediano o largo plazo. Se otorgarán menos préstamos debido a la falta de liquidez y estos préstamos serán para las empresas más solventes