Advierten de que los efectos "reales" de la devaluación son "un déficit comercial galopante", deuda "en máximos" y consumo "débil"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 29 (EUROPA PRESS)
Los economistas Albino Prada y Manuel Lago abogan, en el noveno documento del Foro económico de Galicia, por que los salarios aumenten, al menos en torno a un 1% o un 1,5% –en cualquier caso, por encima de la inflación-, con el objetivo de favorecer la recuperación de la demanda interna y sentar las bases con ello de "un modelo equilibrado" de crecimiento, que evite la entrada en "una nueva recesión".
Prado y Lago han expuesto estas ideas este lunes en Santiago de Compostela en la presentación del análisis que ambos firman y que lleva por título 'Desequilibrio exterior, modelo competitivo y recuperación económica'. En él afirman que "ahora" que "el ciclo económico ha empezado a cambiar", también "debe hacerlo la evolución de los salarios".
"Han de convertirse en un factor, junto a la recuperación del empleo, que dé consistencia y fuerza al crecimiento económico, reforzando el papel de la demanda interna en la nueva fase del ciclo para impulsar la recuperación de la actividad y del empleo", sostienen.
En concreto, a preguntas de los medios de comunicación, el profesor de la Universidade de A Coruña (UDC) y miembro del gabinete técnico del sindicato Comisiones Obreras (CC.OO.) Manuel Lago ha cifrado dicho incremento en un 1% o un 1,5%, aproximadamente, si bien los dos economistas han admitido que "puede haber empresas en las que no sea posible" adoptar esta decisión porque atraviesan aún dificultades que se lo impiden.
Con todo, con carácter general, han apostado por que suban los salarios y Albino Prada ha puesto como deberes a las administraciones públicas lanzar "el mensaje" para que esto suceda, con aumentos en el salario mínimo interprofesional, las nóminas de los empleados públicos –frente a la sucesiva congelación de las mismas–, de las pensiones y de las prestaciones por desempleo.
"TODAS LAS ALARMAS ESTÁN ENCENDIDAS".
Prada ha advertido de un escenario en el que "todas las alarmas están encendidas", pero ha lamentado que, pese a todo, todos los gobernantes sean "muy dados en pensar en términos electorales". "Y podemos darnos un gran batacazo", ha alertado.
Previamente, ha instado a poner en marcha un programa de inversiones públicas a "aquellos países que pueden" en el seno de la Unión Europea, puesto que, de haber continuidad en las políticas actuales, que ha calificado de "austericidas", las "luces" indican que los estados comunitarios "se van a estrellar".
En este sentido, Santiago Lago, junto a los dos autores del texto, ha coincidido en que es preciso, en su opinión, "repensar las recetas que se dieron para la salida de la crisis", así como "huir de los dogmas y hacer políticas inteligentes".
"EL FALSO DISCURSO DE LA COMPETITIVIDAD".
Manuel Lago ha señalado como "falso" el "discurso de la recuperación económica española a través de las exportaciones", aquel que indica que la devaluación de los salarios fue "dolorosa pero necesaria" pues tuvo como consecuencia una mayor competitividad y la posibilidad de vender más fuera.
En base a sus teorías, esto no fue lo que ocurrió, ya que los precios de las exportaciones "no solo no bajaron sino que se mantuvieron o incluso crecieron" y las grandes empresas "aprovecharon la caída de los salarios para mantener precios y aumentar sus beneficios para desapalancarse". La cuota de exportaciones, en este sentido, ha asegurado que "permaneció invariable" durante los últimos años, en un porcentaje próximo al 2%.
Sin embargo, lo que la bajada salarial significó, para este economista, fue el "hundimiento de la demanda interna", por sus repercusiones en el consumo de los hogares. Tuvo de "positivo", según ha reconocido, que las empresas se vieron "obligadas a salir fuera", pero dejó un panorama de recuperación "apoyada en una sola pata", la de las exportaciones, "dejando la demanda interna sin funcionar".
De ahí que el "enorme desafío", a su juicio, es lograr un "modelo equilibrado de crecimiento", para lo que los salarios "tienen que subir por encima de la inflación" y se debe "reforzar" el proceso de internacionalización, con "más empresas" que estén "exportando más productos en más países".
"SALVAR AL CAPITALISMO DE SÍ MISMO".
Del mismo modo ha analizado la situación Prada, al subrayar que la devaluación interna salarial, si bien debía tener "los efectos teóricos" de un aumento del saldo comercial y una disminución del crecimiento de la deuda, los "reales", en su opinión, han sido "un déficit comercial galopante, de nuevo", deuda pública "en máximos" y demanda interna "débil e inestable".
Todo ello en un panorama de "riesgo de entrar en una nueva recesión" y con medidas como la adopción de "rebajas fiscales absolutamente populistas" y la devolución a los funcionarios de parte de las pagas extras suprimidas, ha criticado.
Por ello, ha considerado que son "necesarias nuevas políticas económicas", para "salvar al capitalismo de sí mismo" y que ha enumerado, en el lado de la demanda: aumentar las rentas salariales, "poner al día" el salario mínimo interpofesional, revalorizar las pensiones, incrementar el poder adquisitivo de las retribuciones en la función pública y renta mínima, que "se financia con una reforma fiscal que busque una mayor recaudación".
Ya desde la perspectiva de la oferta, ha propuesto bajar los costes energéticos y los financieros y generar un nuevo modelo productivo –para lo cual, entre otras cuestiones, el noveno documento del Foro económico de Galicia plantea desarrollos marítimo-portuarios vinculados al procesamiento de pescado, energía eólica, maremotriz, turismo y logística ferro-portuaria–.
A la cuestión de si elevar el salario mínimo interprofesional no conllevaría más economía sumergida, Prada ha reconocido que "este país" no es "nada envidiable en esto" y que dicha medida –aumentar el salario mínimo– "crea tensiones". "Pero el problema de la economía sumergida hay que atajarlo independientemente de si lo tocamos o no", ha zanjado.