El economista Gonzalo Bernardos ha participado junto con un grupo de expertos destacados en finanzas y el sector inmobiliario en una mesa redonda organizada por los API (Agentes de la Propiedad Inmobiliaria).
Todos ellos han ofrecido sus previsiones económicos para este año, algunas más y otras menos optimistas. Los tipos de interés son los que marcarán la pauta en todos los casos. Junto a Bernardos, que ejerce de profesor de Economía en la Universidad de Barcelona, han estado presentes en la mesa Vicenç Hernández Reche, presidente de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (ANAI); Julián Salcedo, presidente del Consejo Directivo de Urbanismo, Vivienda y Medio Ambiente del Consejo General de Economistas; Judit Montoriol, lead economista de CaixaBank Research; y Luis Fabra, profesor y director de la Cátedra en Mercado Inmobiliario de la Universidad de Zaragoza.
Junio, mes que marcará el fin de la recesión técnica europea, según Gonzalo Bernardos
Gonzalo Bernardos ha pronosticado que el crecimiento de la Eurozona en 2024 «no será nada satisfactorio» y ha señalado que en España se espera un crecimiento del 1,2%, atribuyendo esta situación a la falta de aprovechamiento de los fondos Next Generation. No obstante, se muestra optimista sobre los tipos de interés, aunque ya para el 2025. Tales afirmaciones también han sido reveladas en el canal oficial de YouTube del profesor.
La cruz de la moneda para Bernardos se refleja en la creación de empleo y advierte sobre los riesgos de un aumento de los tipos de interés y la reducción del crédito bancario. El experto sostiene que la recesión económica finalizará en junio de 2024 y estima que en 2025 la economía crecerá con tipos de interés entre el 2% y el 3%, siempre que la banca cumpla.
Crecimiento económico insuficiente en España
Julián Salcedo, por otro lado, se muestra menos optimista, anticipando que «el 2024 será peor que el 2023» y que el crecimiento de la economía española será insuficiente. Destaca que, a pesar de las expectativas, el sector inmobiliario no se comportó tan mal como se preveía el año pasado, pero la producción de vivienda nueva sigue estancada. Considera que el problema radica en la limitada capacidad adquisitiva, abogando por un aumento significativo del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) vinculado a incrementos de la productividad.
Judit Montoriol prevé que «el 2024 será un año que irá de menos a más», con una desaceleración anual de los precios del 1,5-2% en el primer semestre y un mercado expansivo de cara al 2025, a medida que el impacto negativo se vaya mitigando y las economías europeas recuperen dinamismo.
Luis Fabra destaca que este año se podrían observar los primeros descensos en los precios de la vivienda, siguiendo la tendencia de los últimos meses del 2023. En cuanto a los tipos de interés, prevé que haya alguna mejora a mitad del año, aunque su impacto en el mercado de la compraventa de viviendas será mínimo.