Analistas Financieros Internacionales ha examinado el entorno y ha actualizado sus previsiones, confirmando la desaceleración prevista por el resto de expertos.
Afi, liderada por el economista Emilio Ontiveros, estima que el PIB de la economía española crecerá el 2,2% en 2019, cuatro décimas menos que en 2018, y dos décimas por debajo de su anterior previsión.
En 2020, el ritmo de avance se moderaría ligeramente hasta el 1,9%. A pesar de este menor crecimiento, se mantendrá el diferencial de crecimiento positivo frente al área euro, para la que se espera un avance del 1,1% y 1,3% en los próximos dos años.
Incertidumbre internacional
La coyuntura internacional continuará siendo relativamente desfavorable en los próximos meses, marcada por la incertidumbre y su efecto sobre el comercio y la actividad manufacturera. A lo anterior, se unen señales de una pérdida de dinamismo de la demanda interna, tal y como traslada la evolución reciente del empleo, el consumo y la inversión.
En este contexto, Afi espera que la demanda interna se mantenga como principal fuente de crecimiento, con una aportación de 2,1 puntos porcentuales. El consumo de los hogares podría crecer un 1,7% en 2019 y 1,6% en 2020 apoyado en los salarios y la reducción del desempleo –la tasa de paro se situaría por debajo del 13% en el cierre de 2020–. La inversión seguirá aportando al crecimiento, si bien en menor medida que en años anteriores.
Afi estima un crecimiento del IPC promedio anual del 0,7% para 2019, un punto porcentual por debajo del registro de 2018, en gran medida por el efecto del precio del petróleo sobre los precios de la energía. En 2020, se espera un leve repunte hasta el 0,8%, de manera que la inflación seguirá muy por debajo del objetivo del BCE.