Uno de los propósitos del nuevo para muchos consiste en sacar más rendimiento a sus ahorros. Considerando a 2024 como un año difícil y desafiante en lo económico, una de las inversiones que más darán que hablar en esos meses son los metales preciosos. No obstante, hay que entender en primer lugar las claves de las inversiones en metales preciosos.
Mitos sobre las inversiones en metales preciosos
Asumida la primera parte de la teoría, es menester conocer algunos de los mitos que rodean a estos activos, entre los que se encuentra el oro y la plata como los más conocidos. Daniel Marburger, director de StoneX Bullion Gmbh, desmonta algunos mitos y conceptos erróneos para evitar ser engañados con nuestras inversiones en metales preciosos. Una vez quede aclarada esta otra parte teórica, la visión de este experto es que 2024 es una excelente oportunidad de inversión en metales preciosos debido a su carácter a largo plazo, que no se ve afectado tanto por los cambios del mercado.
Y ahora sí, estos son los grandes cinco mitos explicados y aclarados por Marburger:
- Es demasiado caro para empezar: esta creencia común es errónea, ya que invertir en metales preciosos no requiere un capital inicial elevado. Existen opciones para adquirir pequeñas cantidades de monedas fraccionadas de plata o de oro, haciéndolas accesibles para diversos presupuestos.
- Los metales preciosos no generan ingresos: aunque no producen intereses o dividendos como otras inversiones, pueden aumentar su valor con el tiempo y actuar como protección contra la inflación y la devaluación monetaria.
- El oro y la plata son inversiones anticuadas: a pesar del auge de acciones y activos digitales, los metales preciosos han conservado su valor y relevancia como parte esencial de una cartera de inversiones diversificada durante siglos. No son obsoletos, sino una inversión a largo plazo.
- Almacenar metales preciosos es complicado: desde cajas de seguridad en bancos hasta instalaciones especializadas en almacenamiento seguro de metales, guardar estos activos es sencillo y seguro.
- El mercado es demasiado volátil para ser una inversión estable: aunque los precios de los metales pueden fluctuar, han demostrado históricamente ser una reserva estable de valor, especialmente en tiempos de incertidumbre económica. A largo plazo, su rendimiento tiende a ser más estable en comparación con otras inversiones altamente volátiles.