Fundación MAPFRE ha identificado que existe un colectivo amplio de personas mayores de 55 años a las que les gustaría sacar un mayor rendimiento económico a su vivienda para mejorar su poder adquisitivo o para disponer de una pensión más amplia tras la jubilación, Con vistas a esa necesidad, el Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación MAPFRE acaba de presentar una interesante guía titulada “Vivienda y Pensión. Guía para monetizar la vivienda y mejorar tu pensión”.
Juan Ángel Lafuente Luengo, Catedrático de Economía Financiera y Contabilidad de la Universitat Jaume I, y Pedro Serrano Jiménez, Profesor Titular de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad Carlos III, son los dos autores que han elaborado este documento con el que los sénior podrán descubrir distintas fórmulas para mejorar sus finanzas personales de una manera sencilla.
La presentación de la publicación se ha producido en el Congreso Adinberri Silver Forum en San Sebastián, con la participación del citado profesor Pedro Serrano Jiménez; Juan Fernández Palacios, director del Centro de Investigación Ageingnomics; e Iñaki Ortega Cachón, PHD consejero asesor del Centro de Investigación Ageingnomics.
Datos contextuales sobre vivienda y rendimiento económico
Antes de exponer las distintas vías para sacarle rentabilidad a un inmueble, la situación de los sénior en este asunto es la siguiente. El 29% desearía sacar beneficio de su vivienda y un 25% daría prioridad a su calidad de vida antes que dejar el bien en herencia. Esto quiere decir que una de cada cuatro personas adultas mayores pretende elevar la cuantía de su pensión para preservar su bienestar. La tendencia está cambiando, dando paso a distintas formas de gestionar una vivienda propiedad. Tradicionalmente, la casa se transfería a los herederos sin que los propietarios se beneficiaran de su valor más allá de su uso y residencia.
Esto que explica Fernández Palacios es tan cierto como que ahora la se presentan oportunidades no exploradas anteriormente para capitalizar una propiedad. Para el experto, es importante que el colectivo de los adultos mayores conozcan este tipo de alternativas, así como las opciones de los seguros y los planes de jubilación.
Nuevas opciones de rentabilizar una vivienda
Según la guía presentada por Fundación MAPFRE, se pueden identificar dos clasificaciones en las nuevas opciones para generar ingresos a partir de la vivienda: aquellas que involucran una cesión de la propiedad en vida y las que mantienen la propiedad.
- Las opciones monetarias nuevas basadas en la transmisión de la posesión de la casa permiten obtener capital mediante la venta de la propiedad mientras se conserva el derecho a vivir en ella de por vida. El dueño transfiere la propiedad de su casa a cambio de dinero en efectivo y mantiene el derecho a residir en ella hasta su fallecimiento. Dentro de estas opciones se encuentran la venta de la nuda propiedad, la vivienda inversa y los ingresos vitalicios inmobiliarios:
- Si se trata de la nuda propiedad, el propietario vende su inmueble pero conserva el derecho a un usufructo de por vida, lo cual permite que la persona siga viviendo en la casa hasta su fallecimiento. El nuevo propietario tendrá que esperar hasta ese momento para poder acceder a la casa. Con este producto, el propietario mayor de edad puede obtener alrededor de un 30-75% del valor de mercado de su propiedad, dependiendo de su edad y manteniendo su derecho a vivir en ella de por vida.
- En la vivienda inversa, el dueño vende la plena posesión de la vivienda y se convierte en inquilino de por vida de la misma. Con este método de obtención de dinero, se puede conseguir liquidez por el 50-80% del valor de mercado del inmueble, dependiendo de la edad del beneficiario. A diferencia de la nuda propiedad, donde la persona que adquiere el usufructo puede tener la opción de alquilarla, en la hipoteca inversa no es posible.
- Las rentas vitalicias inmobiliarias también dan la posibilidad de conservar la residencia y recibir ingresos, transfiriendo la propiedad mientras se vive en ella. A través de esta solución, las personas mayores de 65 años obtienen una renta mensual durante el resto de su vida, a cambio de ceder la propiedad de su vivienda al fallecer.
- En las innovadoras alternativas que se basan en la conservación de la titularidad, el dueño obtiene ingresos por una entidad financiera, pero no se produce el traspaso de la titularidad. Estas alternativas pueden ser beneficiosas para aquellos interesados en, por ejemplo, salvaguardar la transmisión del inmueble a sus sucesores. La tenencia de la propiedad siempre la mantiene el propietario principal durante su vida, y sus descendientes o herederos después de su fallecimiento. Dentro de este grupo, hay dos opciones: la hipoteca inversa y el anticipo de alquileres.
- Utilizar un inmueble en propiedad para solicitar un préstamo es lo que se conoce como hipoteca inversa. En este caso, el dinero será devuelto por decisión de los herederos. A través de esta opción, se puede obtener entre un 25% y un 50% del valor del inmueble, dependiendo de la edad de la persona.
- El anticipo de alquileres consiste en otorgar el uso de alquiler de la vivienda (sin su propiedad) a cambio de fondos que permitan al propietario hacer frente al gasto de una residencia u otro lugar al que decida trasladarse. El prestamista recuperará las cantidades anticipadas ya sea mediante un único pago por parte de los beneficiarios, o prolongando la explotación del alquiler durante el tiempo necesario.