La empleabilidad juvenil es uno de los temas que más preocupan a las autoridades y a las propias organizaciones. De una forma u otra la Generación Z tiene que ser la próxima protagonista en el ámbito laboral. No obstante, sus motivaciones para el trabajo son distintas a las de generaciones predecesoras. La Asociación DEC, en colaboración con la consultora IZO, han querido investigar este hecho a través de una investigación que ha cristalizado en un estudio que ofrece una perspectiva fresca sobre la generación Z en el entorno laboral.
Tras conocer sus conclusiones, se puede decir que hay mitos desmontados. Con los datos obtenidos, las empresas pueden contar con una información valiosa para trazar una hoja de ruta que busque atraer y retener a este colectivo. Sirva como resumen del estudio que la generación Z no solo busca empleo, sino experiencias laborales que respeten su bienestar, promuevan la flexibilidad y se alineen con sus valores. Directivos y Empresas ha tenido acceso al contenido del informe, desde el cual surge esta radiografía de la Generación Z.
Generación Z: cuatro perfiles, múltiples perspectivas
El estudio, basado en una muestra de más de 400 jóvenes menores de 30 años con al menos dos años de experiencia laboral, identifica cuatro arquetipos dentro de la generación Z:
- “Las cosas claras” (63%): Este grupo destaca por su compromiso y enfoque en la calidad y el aprendizaje. Valoran la conciliación, pero están dispuestos a esforzarse más cuando es necesario.
- “Sin prisa” (21%): Prefieren estabilidad y rutinas laborales, priorizando la conciliación por encima de la remuneración o el desarrollo profesional. Ideal para entornos como el sector público.
- “Yo lo valgo” (10%): Ambiciosos y orientados al crecimiento, están dispuestos a sacrificar la conciliación por el éxito laboral, priorizando el salario y las oportunidades de desarrollo.
- “Muchas gracias” (6%): Se caracterizan por su compromiso con la inclusión y el propósito, adaptándose bien a startups que ofrecen aprendizaje rápido.
Nuevas prioridades laborales
El estudio también arroja luz sobre las necesidades y prioridades de los jóvenes trabajadores, redefiniendo las estrategias de experiencia laboral para esta generación:
- Conciliación por encima del salario: La generación Z prioriza el equilibrio entre la vida personal y profesional. El bienestar mental y la flexibilidad laboral son factores determinantes, más valorados incluso que un salario competitivo.
- Propósito como valor añadido: Aunque aspectos como el propósito y la inclusión son importantes, no son determinantes. Este grupo los considera un complemento más que una prioridad.
- Flexibilidad y modelos híbridos: Los jóvenes prefieren trabajar bajo esquemas híbridos que les permitan alternar entre oficina y remoto, valorando la libertad de decidir según sus necesidades.
- Trabajo en equipo como motor: La colaboración y la interacción con diferentes áreas son elementos clave en su motivación y satisfacción laboral, alineándose con su interés por entornos dinámicos.
Acciones estratégicas para retener el talento joven
En base a la anterior información recopilada por parte de la Asociación DEC e IZO, los expertos destacan una serie de medidas para que las empresas adapten sus estrategias de retención de la Generación Z:
- Implementar políticas de trabajo flexible y teletrabajo.
- Diseñar planes de carrera personalizados.
- Ajustar salarios y beneficios competitivos.
- Fomentar la inclusión y diversidad.
- Ofrecer programas de bienestar mental y prevenir la sobrecarga laboral.
- Adaptar estrategias de retención a los distintos perfiles identificados.
Por otro lado, la investigación sugiere explorar temas clave como los factores digitales en la experiencia laboral, la visión de managers y directivos, y un análisis más profundo sobre la relación entre salud mental y satisfacción laboral. Estudios recientes revelan que el estrés y la ansiedad afectan significativamente a los jóvenes trabajadores, subrayando la importancia de abordar su bienestar emocional.