La exsecretaria de Estado de Empleo durante la anterior legislatura socialista, Mari Luz Rodríguez, ha cargado contra la reforma laboral, cuando se cumple un año de su entrada en vigor, y ha asegurado que las altas cifras de desempleo demuestran que se trataba de una reforma meramente "ideológica".
MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La exsecretaria de Estado de Empleo durante la anterior legislatura socialista, Mari Luz Rodríguez, ha cargado contra la reforma laboral, cuando se cumple un año de su entrada en vigor, y ha asegurado que las altas cifras de desempleo demuestran que se trataba de una reforma meramente "ideológica".
Así lo señala en un artículo a propósito de la presentación del libro 'No es economía, es ideología', elaborado por el grupo de Economistas Frente a la Crisis.
Según Rodríguez, el Gobierno ha tratado de hacer calar en la sociedad ciertas "verdades científicas" que en realidad son "valores ideológicos", defendiendo que las bajadas salariales crean empleo o que el abaratamiento del despido facilita la contratación.
Así, señala que "como se concibe el trabajo como cualquier otra mercancía, se piensa que bajando su precio habrá más empresas que lo compren", pero que haciendo uso de la flexibilidad que otorga la reforma laboral, los salarios pactados han crecido un 1,31% en 2012 frente al 2,48% de 2011, y que, "sin embargo, no se crea empleo, se destruye".
Rodríguez prosigue diciendo que "hemos escuchado, una y otra vez que el coste del despido estaba frenando la creación de empleo, como si lo que hay que pagar por destruir un puesto de trabajo en el futuro influyera decisivamente en la creación del mismo en el presente".
En este punto, señala que, tras la entrada en vigor de la reforma laboral, que reduce la indemnización por despido improcedente en el contrato indefinido ordinario de 45 a 33 días y elimina la autorización administrativa para presentar un expediente de regulación de empleo (ERE) por causas económicas, durante 2012 ha habido 1,9 millones de despidos, frente a los 1,7 millones de 2011, casi un 11% más.
Por último, la exsecretaria de Estado de Empleo apunta que "la negociación colectiva se está desvitalizando y el modelo de relaciones laborales está perdiendo las propiedades de que le nutría la misma: mayor igualdad entre trabajadores y empresarios, mejor redistribución de rentas y más democracia en las empresas".
