Los acreedores de la autopista de peaje AP-36 que une Ocaña (Toledo) y La Roda (Albacete) cuentan con un mes para comunicar el importe que la sociedad concesionaria de esta vía les adeuda.
MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
Los acreedores de la autopista de peaje AP-36 que une Ocaña (Toledo) y La Roda (Albacete) cuentan con un mes para comunicar el importe que la sociedad concesionaria de esta vía les adeuda.
El plazo arranca este martes, fecha en que ha sido publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el auto de declaración de concurso de acreedores de esta autopista.
Se trata de la cuarta vía de pago de las que actualmente afrontan problemas financieros que se declaró en quiebra en los últimos meses, tras las radiales de Madrid R-3, R-4 y R-5, y la Madrid-Toledo.
La autopista fue declarada en concurso voluntario de acreedores el pasado 4 de diciembre por el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Madrid con un pasivo de 522,08 millones de euros.
Dado el pasivo con que cuenta la autopista, el juez ha designado a dos administradores concursales, al abogado Vicente Flores Argente y a Banco Sabadell. Los acreedores deben comunicar los importes que debe la concesionaria a esta administración concursal.
FACTORES AJENOS.
La autopista Ocaña-La Roda solicitó en octubre acogerse a la Ley Concursal ante la "inminente imposibilidad" de afrontar los pagos de su deuda financiera y por el hecho de que las medidas de apoyo anunciadas por Fomento "no habían sido efectivamente implementadas", según indicó entonces su sociedad concesionaria.
La vía está participada por Cintra (Ferrovial), que controla un 55% del capital, Sacyr (40%) y la antigua Kutxa (5% restante). Forma parte de la decena de autopistas que afrontan desequilibrios por el sobrecoste que soportaron al expropiar los terrenos para su construcción y la caída de los tráficos por la crisis.
La autopista, de 183 kilómetros y en servicio desde 2004, supuso una inversión de unos 523 millones de euros y se concibió como una alternativa a la A-3. En los ocho primeros meses del año contabilizó una intensidad media diaria de tráfico de unos 3.350 vehículos, un 18,7% menos respecto a un año antes, según los últimos datos del Ministerio de Fomento.