MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
En un comunicado, señala que la eliminación de las deducciones para los inquilinos a partir de 2015 o la reducción de las exenciones para los propietarios "paralizan la salida al mercado de las casas vacías y reducen las opciones de los futuros inquilinos, sobre todo de los más jóvenes".
"El Gobierno nos tenía acostumbrados a un discurso donde el alquiler y la rehabilitación eran los únicos sectores inmobiliarios a los que se iban a destinar recursos públicos. La mayor presión fiscal que ahora introduce la reforma hace pensar que el arrendamiento ha dejado de recibir un trato de favor", sentencia.