Ya se he presentando uno de los aceites más emblemáticos del mercado: el Primer Día de Castillo de Canena. La XV edición de este zumo cuenta con Carlos Sainz como padrino y diseñador de la etiqueta de la botella roja que caracteriza a este excelente caldo.
El piloto ha querido plasmar todo el trabajo y sacrificio que hay tras ganar una carrera, así como en los procesos de elaboración de los mejores aceites de oliva virgen extra.
Una de las olivareras más reconocidas de España acaba de presentar uno de sus productos fetiche: la nueva versión del Primer Día de Cosecha, la ya clásica botella roja de Castillo de Canena. Como cada edición de este aceite icónico de la casa, la entidad jienense ha vuelto a contar con una figura ilustre para el diseño de la etiqueta, siendo en este caso el piloto Carlos Sainz.
El madrileño puede presumir de ser uno de los mejores pilotos de la historia, con una trayectoria intachable: campeón del Mundo de Rallyes en los años 1990 y 1992; ganador del Rallye Dakar con Volkswagen en 2010 y en 2018 con Peugeot.
Seguramente, Sainz se una de las pocas personas en recordar este 2020 como bueno tras conseguir una nueva victoria en el Dakar de Arabia Saudí y al recibir el Premio Princesa de Asturias de los Deportes.
Pero todo eso no se consigue porque sí, sino que exige un enorme trabajo y sacrificio. Estos dos valores son los que ha querido transmitir en el diseño de la botella del Primer Día de Cosecha.
“Siempre he creído en el espíritu de superación y en la importancia de la valentía. Sin duda alguna, el Primer Día de Cosecha es uno de ellos y supone un esfuerzo extraordinario”, explica el deportista.
El esfuerzo y sacrificio de la agricultura de precisión
Estos mismos conceptos se dan cita también en la llamada agricultura de precisión que practica Castillo de Canena para obtener los mejores aceites.
Entre la tecnología y la artesanía que requiere todo el proceso, la entidad tiene claro cuál es el día óptimo para dar inicio a cada cosecha de cada varietal.
En tiempo real, se calculan todos los parámetros para medir el estado de salud de cada olivo, así como para observar sus diferentes necesidades. “En Castillo de Canena llevamos produciendo desde 2003 zumos tempranos equilibrados y con un correcto balance. Para ello, es crítico el determinar con exactitud el momento exacto en el que se cosechan los distintos pagos que se han ido seleccionando a lo largo de los meses previos.
Tan negativo es precipitarse como retardar la recolección. Con esta recolección temprana de las aceitunas, conseguimos unos aceites vírgenes extra más intensos, así como un aumento en la cantidad de compuestos fenólicos y en el porcentaje de ácido oleico que contienen”, ha explicado Francisco Vañó, director general de Castillo de Canena.
Cosecha 2020
En la presentación de estos zumos, los responsables de la olivarera apuntaban que este año la recolección se ha anticipado diez días con respecto a la media de los últimos años por una anticipación del estado fenológico de los olivos.
En términos técnicos, ha sido una cosecha media alta, con frutos de calibre medio y el envero ha sido muy homogéneo en los distintos pagos. Además, las altas temperaturas registradas en el pasado mes de octubre han requerido un esfuerzo extra en materia de refrigeración.
Así, el Primer Día de Cosecha Picual llega como un color verde intenso muy expresivo con notas vegetales a hierba verde, almendra verde, plátano verde y hortalizas que le confieren una gran personalidad.
En boca, su sabor es igualmente intenso y complejo desde su entrada. De amargor y picor bien integrados y equilibrados, aparece en boca cierta astringencia de caqui con una persistencia agradable y un retrogusto mentolado y fresco.
La varietal Arbequino presenta aromas de aceituna fresca y verde que destacan sobre notas frutales en este mosto verde brillante con destellos dorados. Destacan olfativamente la hierba verde, los tallos verdes, la fruta verde y madura también, el alcaucil y la almendra verde.
Su entrada en boca es muy agradable y suave, rápido en sensaciones que muestran todas esas notas verdes y frutales, predominando la frescura de la hierba, la cáscara de nuez, la almendra verde y la compota de plátano verde fusionada con el dulzor de la manzana roja. Es muy armónico y elegante en su retrogusto, con un amargo y picante muy equilibrado que desaparece con rapidez.
Castillo de Canena anuncia que esta icónica referencia en el mercado estará presente en más de 50 países, principalmente de Europa aunque también en otras regiones como Estados Unidos, Latinoamérica, Japón y Australia.
Primer memoria de RSC de Castillo de Canena
El otro gran anuncio de la empres andaluza, amén de la presentación de estos zumos, es la elaboración de su primera memoria de Responsabilidad Social Corporativa. Todo un hito que coincide con la adhesión de la organización al Pacto Mundial de Naciones Unidas.
Y es que la agricultura de precisión es sinónimo de sostenibilidad y cuidado del medio ambiente, aquel que tantas alegrías le ha dado a Castillo de Canena a lo largo de su trayectoria.
“En Castillo de Canena fuimos pioneros en certificar externamente nuestra Huella de Carbono e Hídrica. También lo fuimos dentro de nuestro sector en auditarnos en la primera norma europea certificable en RSC (la SGE 21) y en incorporarnos al Pacto Mundial de Naciones Unidas, adhiriéndonos a sus principios y contribuyendo a alcanzar los objetivos más amplios de desarrollo sostenible que marca la Agenda 2030”, ha explicado el director general de Castillo de Canena.
Estos logros explican de alguna manera las principales líneas maestras de la memoria de RSC de la compañía, cuya hoja de ruta se alinea con los famosos Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
La contribución de Castillo de Canena apunta a cuatro ODS específicamente: Salud y Bienestar (al producir y comercializar un zumo natural sano y saludable), Industria, Innovación e Infraestructuras (buscando la excelencia en todos los procesos a través de la Investigación y la Innovación), Producción y Consumo responsable y Vida de Ecosistemas Terrestres (buscando el equilibrio entre el desarrollo económico y el desarrollo sostenible).
Palabras de… Carlos Sainz
Como he dicho en muchas ocasiones a lo largo de mi vida, he tenido la suerte de poder dedicarme a lo que ha sido mi pasión, disfrutando en cada carrera. Esa misma pasión la he podido apreciar en la familia Vañó por sus olivares, buscando siempre la excelencia en sus premiados aceites de oliva virgen extra”