Soplan vientos favorables para Unicaja Banco de cara a los próximos meses. Los últimos resultados financieros evidencian una mejora en la rentabilidad del negocio básico, incrementos en su actividad comercial y una reducción continuada en los gastos de explotación. Argumentos muy potentes para consolidar la fusión con Liberbank.
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La mayoría de las entidades financieras han dedicado una importante suma de capital en el concepto de dotaciones para mitigar los efectos de la pandemia. Así lo han hecho los grandes y esa fue la decisión que tomó Unicaja Banco en su ejercicio de 2020.
Continuando con esta línea estratégica, a marzo de 2021, el Grupo suma un total de 225 millones de euros en provisiones extraordinarias realizadas para el refuerzo de la cobertura por el potencial impacto de la pandemia. Teniendo esto en cuenta, la clave del banco se enfoca en examinar la gestión habitual de su negocio en estos difíciles momentos.
Para ello hay que recurrir a un indicador clave como es el margen básico para medir fielmente la evolución de la rentabilidad de Unicaja Banco. En su cuenta de resultados, este dato refleja un crecimiento del 2,8% en términos interanuales. Del mismo modo, el resultado básico del primer trimestre de 2021 ha aumentado un 27,8%.
Los factores del buen rendimiento de Unicaja Banco
Los responsables del banco atribuyen estos datos a varias cuestiones que, a su vez, explican la fortaleza de esta entidad en el sector. Entre ellas, destaca el esfuerzo realizado en la contención de costes, una línea de trabajo que es calificada como un pilar dentro de la institución que lidera el presidente ejecutivo, Manuel Azuaga. De hecho, entre el primer trimestre de 2020 y el del 2021 se han reducido los gastos de explotación en 9 millones de euros.
En línea con lo anterior, ha sido y seguirá siendo importante la reducción de lo activos no productivos (la reducción acumulada en los últimos doce meses se eleva a 208 millones – un 8,4% – con bajadas del -11,3% en los activos dudosos y del -5,1% en los adjudicados).
Desde el ámbito comercial, el crecimiento de actividades también es palpable y continúa mejorando con el paso de los meses. Muy notable es la evolución de préstamos concedidos tanto en particulares como en el segmento empresas.
Unicaja Banco ha aumentado el número de nuevas operaciones en un 38%, situándose ya muy cerca de los volúmenes que se daban en un entorno no Covid. La otra clave comercial viene dada por unos mayores recursos de los clientes. En el primer trimestre, este dato crece en un 1,3%, elevando la variación interanual en un 9,6%. Dicho aumento responde a más depósitos en balance y más operaciones fuera de balance y seguros.
El fuerte apoyo de la digitalización
La transformación digital de Unicaja Banco también fortalece el aspecto comercial, con novedades como el inicio de la venta online de seguros para el hogar de Caser o el seguro de accidentes de Unicorp Vida (aseguradora participada al 50% por Unicaja Banco y Santalucía). Productos de fácil contratación por parte de los clientes como sencillo es también simular hipotecas desde la banca digital.
Gracias a la nueva herramienta puesta en marcha por la entidad, cualquier usuario puede guardar la información personalizada de la simulación del préstamo para su vivienda, acceder a los productos que más se ajustan a su perfil, así como consultar sus dudas a un gestor remoto.
Este tipo de mejoras estaban contempladas en el Plan Estratégico y de Transformación 2020-2022, el cual fija sus grandes objetivos en la atención al cliente y la dinamización comercial. Cuidar de los canales online se ha convertido en toda una necesidad habida cuenta de que casi el 55% de los clientes de la institución son digitales. Es en la web y en el móvil donde se registran el mayor número de transacciones y consultas, aunque también cabe mencionar el impacto de las TPV en las operaciones.
Al igual que el resto de negocios y sectores, la digitalización se ha visto impulsada por la llegada del Covid y en el caso de Unicaja Banco al cierre del primer trimestre de 2021 las operaciones en canales digitales han aumentado un 38%, con importes que superaron en un 10% todo lo contabilizado en el mismo periodo del año anterior.
Hay que recordar que en noviembre del año pasado se produjo el lanzamiento de la nueva banca digital de Unicaja Banco y desde entonces se han ido ampliando servicios y capacidades funcionales.
Para ello, la entidad se está apoyando en el conocimiento de otros agentes (fintechs y startups) para explorar nuevas soluciones que hagan más eficiente la experiencia digital de los clientes. Fruto de esta labor en innovación han surgido iniciativas como el primer chatbot de Unicaja Banco, que responde a los empleados sobre una línea de productos determinada.
El proceso de fusión con Liberban llega en buen momento
Sin duda todo lo anterior favorece el nuevo entorno que tiene la entidad por delante tras la aprobación de la absorción de Liberbank, sujeta, al cierre de esta edición, a la obtención de las autorizaciones correspondientes. El quinto banco español por volumen de activos está previsto que cuente con Manuel Azuaga como presidente ejecutivo y con Manuel Menéndez (actual CEO de Liberbank) como consejero delegado. Las Juntas Ordinarias de Accionistas ya han aprobado sus respectivas cuentas de 2020, la futura composición del consejo de administración, así como el reparto de dividendos.
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Comprometidos con la RSC y la sostenibilidad
Siendo crítica la parte financiera y comercial, la RSC y la sostenibilidad son también una prioridad para Unicaja Banco a tenor de los últimos acontecimientos. En este sentido, destaca la renovación de la colaboración con el Club Baloncesto Silla de Ruedas Valladolid (BSR Valladolid), entidad fundada en 1994 y que milita desde hace 26 temporadas en la División de Honor a nivel nacional de esta disciplina deportiva.
En cuanto al avance de las finanzas sostenibles, Unicaja Banco ha aprobado tres nuevas políticas específicas: la Política de Sostenibilidad, que concreta el posicionamiento del Grupo en esta temática; la Política Ambiental, Energética y de Cambio Climático, para establecer los principios básicos de actuación en materia medioambiental, de eficiencia energética y de gestión en materia de cambio climático; y la Política de integración de los riesgos de sostenibilidad en el proceso de toma de decisiones y en el asesoramiento sobre productos de inversión y seguros.
Al respecto, Unicaja Banco puso en marcha el pasado mes de marzo un plan de formación en materia de finanzas sostenibles, destinado a la totalidad de su plantilla.
El objetivo es sensibilizar en este ámbito y dotar de las competencias básicas necesarias, teniendo en cuenta el nuevo marco regulatorio de la sostenibilidad y el compromiso de la entidad con los factores ASG (ambientales, sociales y de gobernanza), puestos de relieve por medio de su Plan de Acción de Finanzas Sostenibles.