Caída del cabello, ¿cuándo preocuparse? Un experto responde a esta manida pregunta

.

La caída del cabello es una de las inquietudes más frecuentes en las consultas dermatológicas. Así lo pone de manifiesto el especialista en tricología del centro Olympia Quirónsalud, el doctor Borja Díaz Guimaraens. El experto declara para Directivos y Empresas que son muchas las personas que acuden a su consulta con la misma pregunta: “¿Es normal que se me caiga tanto el cabello?”

La respuesta requiere un cierto estudio que comprende aspectos como el estilo de vida del cabello de los pacientes y todo el contexto que le rodea. Es decir, se necesita entender todo un proceso para asegurar cuándo hay que preocuparse y poder tomar medidas al respecto. En ese entendimiento, la teoría dice que el ciclo del cabello tiene tres diferenciadas:

  • Fase anágena (crecimiento): dura aproximadamente cinco años y es cuando el cabello crece activamente.
  • Fase catágena (descanso): dura unas tres semanas, en las que el folículo se prepara para la fase final.
  • Fase telógena (caída): tiene una duración de tres meses y culmina con la pérdida natural del cabello.

En condiciones normales, cerca del 90% de los folículos capilares se encuentran en fase de crecimiento. La pérdida diaria de entre 100 y 150 cabellos es parte del recambio habitual del cuero cabelludo. Por tanto, ante tal situación que se podría calificar como «natural», no hay motivos para preocuparse.

Señales de alerta en la caída del cabello

Aunque la caída diaria es normal, hay ciertos indicios que pueden requerir atención médica:

  1. Pérdida persistente de cabello por más de dos meses.
  2. Aparición de áreas con menor densidad capilar o calvitas visibles.
  3. Caída asociada a molestias como dolor, picor, descamación o lesiones en el cuero cabelludo.

Ante esas casuísticas, el doctor Díaz Guimaraens resalta la importancia de una evaluación tricoscópica para identificar posibles alteraciones en los folículos y diagnosticar el tipo de alopecia. Con más de 50 clasificaciones existentes, el diagnóstico preciso no solo ayuda a entender el problema, sino también a prever su evolución y ofrecer el tratamiento más adecuado. Las técnicas actuales permiten abordar la caída del cabello desde múltiples tratamientos: desde tópicos hasta procedimientos avanzados, que pueden adaptarse según la causa y la evolución del problema.

“La salud capilar es un reflejo del equilibrio interno y externo del organismo. Con un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado, es posible mantener la calidad del cabello en todas las etapas de la vida”, explica el especialista.

Dos factores de impacto en la salud capilar

Además de las señales de alerta anteriores, el experto de Olympia Quirónsalud recalca que hay dos factores que siempre van a tener mucha influencia en la salud capital. Se trata del envejecimiento y el embarazo, los cuales se traducen en estas dos patologías:

  • Alopecia senescente: Con la edad, la vascularización del cuero cabelludo disminuye, lo que reduce la actividad de los folículos. A partir de los 60 años, muchas personas notan una pérdida difusa de densidad capilar, conocida como alopecia senescente. Aunque es leve, puede tratarse para mejorar la calidad del cabello.
  • Efluvio postparto: Durante el embarazo, los altos niveles de estrógenos prolongan la fase de crecimiento, lo que genera mayor densidad y brillo capilar. Sin embargo, después del parto, muchos cabellos entran simultáneamente en la fase de caída. Este proceso, conocido como efluvio postparto, suele ser temporal. No obstante, si persiste más de un año o se observa una pérdida progresiva, es fundamental acudir a consulta para descartar problemas más serios como alopecias asociadas.
¡Suscríbete a nuestra Newsletter!
Mira nuestras
Últimas noticias relacionadas
¡Suscríbete a nuestra Newsletter!

¡Suscríbete a nuestra revista!