Una cama hiperbárica, también conocida como cámara hiperbárica o terapia hiperbárica, es un dispositivo médico que se utiliza en medicina hiperbárica para administrar oxígeno puro a una presión superior a la presión atmosférica normal. Esta terapia se lleva a cabo en una habitación sellada donde los pacientes respiran oxígeno puro a una presión mayor que la presión atmosférica al nivel del mar.
El objetivo principal de la terapia hiperbárica es aumentar la cantidad de oxígeno en la sangre y en los tejidos del cuerpo, lo que puede acelerar la curación de ciertas afecciones médicas y promover la regeneración de tejidos dañados. La terapia se utiliza en una variedad de condiciones médicas, que van desde la cicatrización de heridas hasta el tratamiento de enfermedades descompresivas en buceadores.
La terapia hiperbárica y su efecto en el paciente oncológico
En esa horquilla de posibilidades que ofrece la terapia hiperbárica, esta terapia también se puede aplicar a personas que se encuentran en proceso de tratamiento y recuperación de un cáncer.
La doctora Ane Escribano, oncóloga radioterápica y responsable del servicio de Medicina Hiperbárica en Olympia Quirónsalud, destaca que en los últimos años se han desarrollado cada vez más tratamientos que ofrecen diversas terapias de apoyo para mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer.
La medicina hiperbárica es una de estas nuevas formas de apoyo que, según la doctora Escribano, ha demostrado ser especialmente beneficiosa en el proceso de recuperación de los pacientes sometidos a radioterapia y quimioterapia. Además, estudios recientes respaldan la eficacia de la medicina hiperbárica en la mejora de la respuesta del sistema inmunológico, reduciendo la fatiga y optimizando los tratamientos convencionales para el cáncer en pacientes seleccionados.
La doctora destaca que esta terapia es considerada una terapia farmacológica que ofrece una acción anti-hipóxica importante, especialmente en tumores altamente hipóxicos que son más resistentes a los tratamientos convencionales con radioterapia y quimioterapia.
«Los pacientes experimentan una mejora en la cicatrización de heridas, reducción de efectos secundarios y complicaciones derivadas del uso de la radioterapia y una mayor tolerancia a los tratamientos, ofreciendo una perspectiva más positiva durante la lucha contra el cáncer”, asegura la doctora Escribano.
Actualmente, se están investigando los posibles beneficios de administrar oxígeno hiperbárico simultáneamente con los tratamientos convencionales para el cáncer, con el objetivo de aumentar la destrucción tumoral y mejorar la curación en determinados tipos de tumores. “Hay tumores que son altamente hipóxicos y por tanto más resistentes a los tratamientos con radio y quimioterapia”, matiza la especialista.
Además de su efectividad en el tratamiento del cáncer, la terapia hiperbárica ofrece numerosos beneficios para la salud en general, incluyendo la cicatrización de heridas, el bienestar general y el rejuvenecimiento cutáneo, entre otros. Se están investigando sus posibles beneficios en diversas patologías como la fibromialgia, cefaleas, dolor crónico, entre otras.