Prácticamente toda organización importante dedicada a la salud trabaja bajo tres parámetros clave en su gestión: la propia salud, los datos y la inteligencia artificial. Un trinomio que ha cobrado importancia tremenda durante la pandemia de la Covid-19. No en vano, antes de la crisis, muchos de estos agentes consideraban que el futuro del sector pasaba por las tecnologías. Ahora, más de dos años después, las herramientas de inteligencia dominan todas las áreas de hospitales y centros médicos, aportando una mayor eficiencia en los recursos.
Así que en 2022 muchos de los planes pasan por seguir adoptando e implantando soluciones digitales. Según datos del estudio elaborado por Morning Consult para IBM “Índice Global de Adopción de Inteligencia Artificial 2022”, el 48% de las empresas españolas tiene previsto invertir en Inteligencia Artificial este 2022.
A seguir el paso a China y Estados Unidos en la gestión sanitaria
“El desarrollo de la Inteligencia Artificial debe estar precedido de una digitalización completa”, señala Juli Climent, responsable de Inteligencia Artificial en ASHO, empresa líder en codificación sanitaria. Apunta el directivo que estos procesos son “los ejes de las economías modernas” y señala como ejemplos a seguir los modelos de Estados Unidos o China, las cuales «llevan muchos años integrando estas tecnologías».
Por su parte, la directora gerente de esta entidad, Ruth Cuscó, asegura que “el valor de la Inteligencia Artificial se ha visto incrementado por la aceleración de la transformación digital en las empresas y los retos que ha provocado la pandemia de la COVID-19. El sector sanitario no puede quedarse atrás”, asevera la experta.
El Healthcare 4.0 está basado en datos
En esta transición hacia el healthcare 4.0, todas las organizaciones tendrán que poner el foco en la gestión de los datos, el nuevo petróleo para la economía y un reto para la salud, debido al gran volumen de información que genera.
“El uso de la Inteligencia Artificial en el sector sanitario, o ‘Healthcare 4.0’ nos permitirá monitorizar datos para hacer un seguimiento de los patrones del pulso de un paciente para determinar cuándo deberá ir al médico si algo va mal, por ejemplo”
Juli Climent
Así que, la adaptación de herramientas que faciliten la extracción, gestión y análisis de todos los datos será clave para todos los entornos sanitarias. Sin duda, el 5G, el Cloud Computing, el Big Data o la Inteligencia Artificial serán las tecnologías que reinen en toda gestión sanitaria.