El Dr. Xavier Viñolas Prat, director del Institut del Cor, antigua Unidad de Cardiología del Hospital Quirónsalud Barcelona, nos explica el cambio que ha experimentado su servicio para atender a patologías que en estos momentos son la primera causa de mortalidad en España. Es un gran paso a la medicina de los nuevos tiempos, viene a señalar el especialista.
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La Unidad de Cardiología del Hospital Quirónsalud Barcelona pasa a ser el Institut del Cor. ¿A qué responde este cambio más allá de la nomenclatura? ¿Cuáles son las grandes novedades de esta nueva etapa?
Hoy en día hay que cambiar el sistema de organización de servicios a estructuras más grandes. Al ser un Instituto abarcamos todos los aspectos relacionados con la patología cardiovascular.
Es una visión más amplia y tiene un enfoque superior a lo puramente cardiológico, por ello nos interrelacionamos mucho más con otras especialidades. Es el gran cambio de los nuevos tiempos, hacer de los servicios y las atenciones al paciente más amplias de lo que teníamos anteriormente.
Los casos más frecuentes que ve el Dr. Xavier Viñolas
En los últimos años han realizado más de 50.000 consultas. Una cifra elevadísima que da que pensar en primer lugar en la incidencia de la patología cardiológica. ¿Cuál es perfil más habitual que atienden y qué lectura hace de tantas consultas?
La realidad es que cuando uno observa el número de consultas que hacemos, son efectivamente muchas. Lo primero que hay que decir es que la patología cardiovascular es la más frecuente que tenemos en la sociedad y es la mayor causa de mortalidad de la población adulta.
En segundo lugar, creo que hay que destacar que cada vez más personas han entrado en la dinámica de la medicina preventiva, con revisiones más periódicas. Es muy importante hacer una evaluación del riesgo cardiovascular si queremos prevenir enfermedades o tratarlas desde etapas tempranas.
La nueva patología que va apareciendo y que es causa del envejecimiento poblacional son todas las afectaciones valvulares
Si nos detenemos en el perfil de los pacientes, vemos que el espectro es muy amplio porque abarca desde la propia valoración de riesgos hasta pacientes que vienen a una segunda opinión por casos complejos. Entre las patologías más numerosas, podemos decir que hay un crecimiento grande de algunas de las arritmias, pero también abunda la cardiopatía isquémica (infartos), aunque ahora estamos en una fase de cierta bajada de infartos.
La otra epidemia que hay es la de la insuficiencia cardiaca, motivo por el que atendemos a un alto número de pacientes de edades altas. La nueva patología que va apareciendo y que es causa del envejecimiento poblacional son todas las afectaciones valvulares. Estas dolencias las tenemos que explicar mejor a la sociedad porque están infradiagnosticadas.
¿Esa mayor querencia de la gente por la medicina preventiva cree que se ha acentuado con la pandemia?
Probablemente sí. Tuvimos un parón de un tiempo prolongado de servicios y algunas patologías las habíamos ‘olvidado’ un poco. Al mismo tiempo, hablamos de enfermedades que no habíamos tratado en un año y medio y, por tanto, ahora los pacientes ven una mayor necesidad de evaluarse o revisar las patologías que habían tenido previamente. Tampoco hay que olvidar que la Covid-19 ha dado problemas cardiológicos, con lo cual es un motivo más que explica el aumento de revisiones a los pacientes.
En su especialidad es clave la educación sanitaria de pacientes y el seguimiento que se hace los mismos. ¿Cómo actúa Quirónsalud Barcelona en estos procedimientos?
La educación sanitaria es importantísima y debe empezar desde la etapa de la juventud. No solo tenemos que pensar en campañas para pacientes que vemos, sino también a los que no vemos, que son los jóvenes. Eventos y jornadas especiales sobre cardiología hay que potenciarlos más en colegios y este es uno de los objetivos que nos hemos marcado desde el Institut del Cor.
Más del 80% de nuestros pacientes son pluripatológicos. De este modo, la relación que tenemos con otras especialidades como medicina interna o geriatría es clave
Misma importancia hay que darle al seguimiento de pacientes, porque la mayor parte de ellos son pluripatológicos y además muchos casos no son curables, sino que los controlamos con mediación. Por ejemplo, en el caso de un infarto sabemos que un buen control sanitario con médicos y enfermería reducen los reingresos de pacientes. Es otro objetivo que tenemos, fomentar un mayor control de la patología. Esto también resume el cambio de pasar de un servicio a un instituto.
El servicio ha ido incorporando tecnologías en los últimos años para dar la mejor respuesta en diagnóstico y tratamiento. ¿Cuáles son las innovaciones más destacables que presenta el Institut del Cor?
Hoy en día, un instituto puntero debe contar, por un lado, con una parte diagnóstica muy avanzada. Hablamos de tecnología de imagen, resonancias cardiacas, etc. que son absolutamente fundamentales. La parte de escaneo y resonancia ha experimentado un avance enorme en la industria y uno no puede tener un buen Institut del Cor sin estas innovaciones.
Por otra parte, es básico disponer de los mejores y más avanzados tratamientos. Además de todo lo que veníamos haciendo anteriormente, si tenemos que resaltar dos grandes avances en la actualidad, son las sustituciones valvulares sin cirugía (solo cateterismo) y la consolidación o boom de las nuevas técnicas para la curación de arritmias.
Respecto a la cirugía cardiaca podemos hablar de la llegada de técnicas menos invasivas con el apoyo de videoasistencia y sin la necesidad de hacer grandes incisiones.
El sello dorado de la JCI que tiene su hospital también comprende que estas tecnologías garanticen la mayor seguridad de los pacientes…
Es un must para nosotros. Con esta acreditación se garantiza la seguridad de las personas en los procesos asistenciales. Nosotros añadimos una capa más porque aplicamos las técnicas y tratamientos a la gente que realmente lo necesita. Es aportar un mayor valor. Solo hacemos pruebas de imagen o cirugías al paciente que realmente lo necesita. Es uno de los leit motiv de nuestro Instituto.
Sabiendo cómo prevenir las enfermedades cardiovasculares, ¿por qué éstas siguen siendo una de las principales causas de fallecimiento entre la población?
Porque a veces llevar la teoría a la práctica es difícil. Estamos hablando de un cambio de mentalidad. No obstante, hemos conseguido disminuir la tasa de fumadores que puede estar relacionado con un menor número de cardiopatías. Pero es una lucha larga que no podemos llevarla a cabo solamente los médicos.
Hay que empezar con ella desde la educación en la infancia. Debe existir un mayor compromiso social en ello y ahí radica la dificultad porque el estilo de vida de hoy en día no hace fácil mantener hábitos saludables. Es relevante este tipo de prevención para poder reducir las muertes por causa cardiológica.
Dado que hay mucha patología que puede derivar en complicaciones cardiacas, ¿qué nivel de integración con otras especialidades tiene su servicio?
El cambio de nuestro servicio vino motivado por eso, entre otras cosas. Más del 80% de nuestros pacientes son pluripatológicos. De este modo, la relación que tenemos con otras especialidades como medicina interna o geriatría es clave.
Lo normal es que recibamos pacientes con edad avanzada y patologías como la diabetes. Debemos dar a este tipo de pacientes una consulta integral y conjunta. Y hoy en día las tecnologías nos permiten que participe más de un médico en las tomas de decisiones.
Las personas deben tener un médico principal que lidere su patología y un asesor que esté al tanto de todo. Ese es el reto, ser una organización más holística y con abordajes conjuntos, olvidándonos de departamentos estancos.
El propio nombre de su unidad – Institut del Cor – sugiere facetas como la formación e investigación. ¿Qué nos puede decir sobre estas actividades en su organización?
Hoy en día no se puede concebir una buena asistencia sin investigación y sin docencia. Es una obligación para nosotros, pero es que está demostrado que los servicios e institutos que hacen investigación y formación tienen una mayor calidad asistencial para los pacientes.
Eso quiere decir que debemos contar con muchos ensayos clínicos en marcha y personas formándose en pregrados y postgrados porque redunda en un claro beneficio para el paciente.
Causas medioambientales como temperaturas extremas de frío y calor pueden estar asociadas a un mayor número de cardiopatías. ¿El cambio climático está relacionado con más dolencias de este tipo?
Para un enfermo cardiaco crónico con una insuficiencia, por ejemplo, cuanto más estable sea su entorno, mejor. Todos hemos visto que en los cambios bruscos de temperaturas se da un mayor número de fallecidos. Por otro lado, empiezan a abundar muchas publicaciones científicas hoy en día sobre la incidencia en la salud de la contaminación ambiental.
Se está observando que los días de mayor polución tenemos más descompensaciones cardiovasculares. Por tanto, sí, el cambio climático estaría detrás de un mayor número de cardiopatías y es necesario hacer una mayor divulgación sobre ello para concienciar a la sociedad.