El cáncer de mama representa el tumor más frecuente en mujeres, con más de 33.000 casos diagnosticados cada año. No obstante, las voces expertas señalan que las tasas de supervivencia son muy altas, alcanzando casi el 90% de los casos. En todo ellos, la prevención es la clave y cuanto más precoz sea su diagnóstico, mejor.
Especialistas como la doctora Silvia Pérez Rodrigo, jefa del la Sección de Radiología de la Mama del Hospital La Luz, señalan al respecto que el examen de mamas es imprescindible para detectar cualquier anomalía. De hecho, hace un llamamiento a realizar cribados antes de los 50 años, de acuerdo con estudios científicos y guías clínicas existentes.
La eficacia de la mamografía con contraste o resonancia magnética en el cribado
La doctora, añade que “cada vez está más extendida la recomendación de realizar los cribados a partir de los 40 años. Esto genera sin duda una necesidad económica y en algunos casos la necesidad de realizar otras pruebas complementarias”.
Entre ese tipo de test, Pérez Rodrigo indica que la mamografía con contraste o la resonancia magnética (RM), cada vez más extendidas, “están generando resultados espectaculares que nos orientan a personalizar los cribados según los perfiles de riesgo. Además, la introducción de sistemas de Inteligencia Artificial está logrando disminuir los falsos positivos que pueden generar estas pruebas, es decir aquellas imágenes que pueden ser dudosas en mamografía y requieren de algún otro estudio pero que finalmente no son nada”.
Las virtudes de la mamografía con contraste o la RM que defiende esta responsable en el Hospital La Luz responden al plan europeo en la lucha contra el cáncer, el cual presente ofrecer cribados más personalizados gracias a los avances tecnológicos. El programa UEproSalud será un apoyo financiero muy importante para este reto, dentro del cual ya se están examinando prototipos como el proyecto Mammowave, mamógrafo basado en microondas en lugar de radiación, probándose ya en Hospital Universitario de Toledo, que liderará desde España a más de 9 hospitales europeos, informa Pérez Rodrigo.
Tratamientos innovadores: sobre el sistema inmunológico y la radioterapia más avanzada
Pasando de diagnósticos a tratamientos prometedores, un reciente estudio realizado en el Programa de Cáncer del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM-Hospital del Mar) y publicado por la revista Nature Cancer, ha descubierto un abordaje que puede incrementar el éxito de la inmunoterapia en uno de los tipos de cáncer de mama más agresivos, el cáncer de mama triple negativo. Para estos casos, la doctora Esther Holgado, jefa del servicio de Oncología Médica del Hospital La Luz, afirma que “un tratamiento sobre el sistema inmune permite que éste se adapte a la aparición de nuevas mutaciones del tumor, lo que se traduce en el control de la enfermedad”.
Del mismo, esta otra especialista informa que la radioterapia en el cáncer de mama está avanzando hacia una mayor personalización. Esta opción, tal y como recuerda la SEOR (Sociedad Española de Oncología Radioterápica) es clave para la mayor supervivencia de esta enfermedad. Sobre ello, la jefa de Oncología Radioterápica del Hospital La Luz, la doctora Elia del Cerro, mantiene que las sesiones de hoy en día se ajustan tanto a las características del tumor como a las propias de cada mujer. “Las técnicas de hoy son capaces de administrar altas dosis al tumor, protegiendo al máximo los órganos adyacentes”, indica la doctora del Cerro.
Entrando en detalle sobre la radioterapia avanzada, la experta explica que los tratamientos se realizan con muy alta precisión, gracias a una dotación adecuada de aceleradores lineales y a la tecnología Deep inspiration breath hold, la cual consiste en administrar la radiación en inspiración forzada manteniendo el paciente la respiración y consiguiendo disminuir la exposición a la radiación de los pulmones y el corazón.
Este paso adelante que ha dado la tecnología radioterápica ha permitido reducir el número de sesiones a las pacientes. La doctora Elia del Cerro reconoce que en el cáncer de mama se ha pasado de dar de 25 a 30 sesiones a administrar a día de hoy nuevos fraccionamientos de 5 a 15 sesiones, depositando una dosis total igual.