Pasan los años y enfermedades cono Alzheimer siguen sin obtener grandes avances desde la ciencia para curación. Pero más que en su curación, los expertos se están centrando en la detección precoz de la que se considera la demencia más frecuente. Una enfermedad que avanza de forma lenta y progresiva en los pacientes, suponiendo un deterioro cognitivo en áreas como la memoria, el lenguaje y la orientación.
Desde el punto de vista de la detección precoz, los investigadores están siguiendo la pista a los biomarcadores que, sin ser causa directa del Alzheimer, sí tienen participación en el proceso neurodegenerativo. Concretamente, la proteína TAU parece arrojar pistas al respecto.
“El Hospital Universitario Quironsalud Madrid ha incorporado a su cartera de biomarcadores de imagen neuronal la proteína TAU para estudios PET-CT en pacientes con deterioro cognitivo dentro de un protocolo de investigación. La detección de esta proteína en el cerebro puede ser uno de los indicadores que nos muestren las fases iniciales de la enfermedad”, explica el Dr. Antonio Maldonado, jefe del Servicio de Medicina Nuclear e Imagen Molecular del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid.
Referente en el estudio del Alzheimer
El hospital y el Servicio de Neurología se posicionan como grandes referentes en el estudio del Alzheimer debido al tiempo empleado en ello como a la calidad de los estudios y proyectos realizados hasta la fecha. A estas investigaciones se une un nuevo radiofármaco 18F-TAU, que permite ampliar el espectro de abordaje molecular que puede ser analizado en el equipo PET-CT de última generación disponible en el hospital.
Proteína TAU y Beta-amiloide
En estos momentos, los estudios se están intensificando sobre los dos biomarcadores que están ayudando a definir mejor a la enfermedad: la proteína Beta-amiloide y la proteína Taul. Ambas se pueden obtener a través del estudio del líquido cefalorraquídeo o por medios de estudios de Medicina Nuclear como el PET-CT, técnicas que no se utilizan en la práctica habitual pero que poco a poco se irá generalizando su uso para la detección cada vez más precoz de la enfermedad.
“En estos momentos los resultados de los tratamientos frente al Alzheimer son moderados por dos causas: no haber obtenido los fármacos que alteran ciertas proteínas que creemos que tienen una importancia capital en la enfermedad y, segundo, que solemos llegar un poco tarde al iniciar las terapias. Toda la investigación se centra en hallar nuevos fármacos que bloqueen las proteínas Beta-amiloide y Tau en estadios más iniciales e incluso en asintomáticos”
Dr. Rafael Arroyo, jefe del Servicio de Neurología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid.