De todos los tratamientos estéticos, hay uno que en estos momentos es el más demandado por la población española. Se trata de la blefaroplastia o cirugía de los párpados, una opción que está completamente en los principales centros especializados y para la que hay grandes innovaciones, según comentan distintos especialistas para Directivos y Empresas.
Dentro de las cirugías faciales, las cifras de la blefaroplastia están en niveles récord en estos momentos con 20.000 procedimientos cada año. Se busca rejuvenecer la mirada, feminizar el rostro y, en otros casos, tratar en enfermedades oculares.
Factores que están detrás del auge de la blefaroplastia
La creciente preocupación por la imagen personal, el uso generalizado de las redes sociales y la influencia de los filtros digitales han provocado que un número cada vez mayor de personas busquen mejorar su apariencia a través de la blefaroplastia. La sobreexposición a plataformas digitales, donde las imágenes son editadas con filtros que modifican y embellecen rasgos, ha generado un estándar de belleza que influye en la decisión de recurrir a la cirugía estética.
Otros factores que están detrás de la alta demanda de este procedimiento hay que buscarlo en la pandemia de la Covid-19. Aquella crisis sanitaria jugó un papel crucial en esta tendencia. El uso prolongado de mascarillas llevó a que los ojos y la mirada se convirtieran en los protagonistas del rostro, despertando en muchas personas el interés por rejuvenecer y embellecer su expresión facial.
Qué objetivos se buscan con la blefaroplastia y cómo lo hacen los especialistas
La blefaroplastia es realizada por cirujanos maxilofaciales altamente especializados, quienes no solo eliminan el exceso de piel o las bolsas de grasa en la zona ocular, sino que también pueden redistribuir el tejido para lograr un efecto más natural y armonioso. Esta intervención se divide en dos tipos principales: la blefaroplastia superior, que corrige la piel redundante en los párpados superiores mediante una incisión disimulada en el pliegue natural del ojo; y la blefaroplastia inferior, que trata las bolsas y el exceso de grasa en los párpados inferiores mediante incisiones internas o externas que resultan prácticamente imperceptibles.
El avance de la tecnología médica ha permitido que estos procedimientos sean cada vez menos invasivos y con tiempos de recuperación más cortos, lo que ha facilitado su acceso a un público más amplio.
Más allá del objetivo estético, la blefaroplastia también puede mejorar la funcionalidad del ojo en algunos casos, especialmente cuando el exceso de piel en los párpados superiores afecta el campo de visión.
La relevancia de este procedimiento será uno de los temas principales en el curso Avances y Tendencias en el Manejo de la Patología Orbitaria, organizado por la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial y de Cabeza y Cuello (SECOMCyC) el próximo 14 de marzo. Expertos de renombre, como los doctores Fernando Almeida (secretario de la Sociedad) y Dolores Martínez (jefa del Servicio de Cirugía Oral y Maxilofacial de la Fundación Jiménez Díaz), abordarán el impacto de la cirugía estética ocular, los avances en su práctica y la creciente demanda de este tipo de intervenciones.
La feminización facial y su impacto en la cirugía orbital
Otra de las tendencias que están marcando el rumbo de la cirugía maxilofacial es la feminización facial, una técnica en aumento dentro del colectivo transexual. En este procedimiento, se busca modificar las estructuras óseas del rostro para suavizar rasgos y otorgar una apariencia más femenina. Como explica el doctor Carlos Bailón, experto en la materia, la morfología orbital masculina difiere considerablemente de la femenina, con un reborde supraorbitario más prominente y pómulos más marcados. Para lograr una feminización efectiva, los especialistas deben limar el hueso orbital y realizar ajustes en la estructura ósea periorbitaria, un procedimiento altamente especializado que permite armonizar el rostro con la identidad de género del paciente.
Por su parte, la doctora Dolores Martínez destaca la creciente demanda de estas intervenciones y subraya la importancia de la cirugía del marco orbitario en los procesos de feminización. Según la experta, los avances en técnicas quirúrgicas han permitido mejorar la naturalidad de los resultados, ofreciendo a los pacientes procedimientos más precisos y personalizados.
Un enfoque multidisciplinar en la cirugía orbitaria
El campo de la cirugía orbitaria no se limita exclusivamente a procedimientos estéticos. La órbita, que alberga el globo ocular y sus estructuras anexas, puede verse afectada por diversas patologías, desde traumatismos hasta tumores o enfermedades inflamatorias. El tratamiento de estas condiciones requiere un enfoque multidisciplinar en el que cirujanos maxilofaciales, oftalmólogos y otros especialistas trabajan en conjunto para ofrecer soluciones integrales a los pacientes.
La evolución de la tecnología médica ha sido clave en este ámbito. Herramientas como la planificación quirúrgica en 3D, la navegación intraoperatoria y el uso de modelos estereolitográficos han revolucionado la precisión de las intervenciones. Estas técnicas permiten una mayor personalización de las cirugías, reduciendo riesgos y mejorando los resultados. Asimismo, la reciente incorporación de la Inteligencia Artificial en la planificación quirúrgica está facilitando diagnósticos más certeros y procedimientos más eficientes.
La cirugía orbitaria en el tratamiento de traumatismos y tumores
Uno de los temas más relevantes dentro del curso organizado por SECOMCyC será el abordaje de los traumatismos orbitarios. Según el doctor Fernando Almeida, estas lesiones son frecuentes debido a accidentes de tráfico, agresiones y actividades deportivas. Las fracturas orbitarias, cuando no son tratadas adecuadamente, pueden generar secuelas funcionales y estéticas significativas, lo que hace fundamental una intervención quirúrgica precisa y oportuna.
En el caso de los tumores orbitarios, los especialistas abordarán las distintas formas de tratamiento, desde la extracción de pequeñas masas hasta cirugías complejas que requieren la reconstrucción del área afectada. Los tumores palpebrales, aunque poco frecuentes, representan un desafío debido a la complejidad de la reconstrucción del párpado, ya que esta estructura no solo tiene una función estética, sino también un rol fundamental en la protección del ojo y en la distribución de la lágrima.
